A sus 18 años, Patricia Rodríguez estudia Bio-tecnología en la Universidad Pablo Olavide de Sevilla. Gracias a su constancia y dedicación el año pasado obtuvo una medalla de plata en las Olimpiadas Nacionales de Química, siendo alumna de 2º de Bachillerato en el instituto de Las Lagunas de Mijas.

Su esfuerzo se vió ayer reconocido en la primera edición de ´Málaga, excelencia educativa´, una iniciativa de la Delegación de Educación que pretende reconocer la labor de los centros educativos, profesores y alumnos malagueños en la búsqueda de la excelencia educativa y que se celebró ayer en el Teatro Las Lagunas de Mijas.

"Se trata de un reconocimiento público al esfuerzo por superarse y el deseo de crear una sociedad mejor por parte de nuestra comunidad educativa, y no lo digo yo, lo dicen entidades educativas regionales, nacionales e, incluso, comunitarias en algunos casos", destacó el delegado de Educación, Antonio Escámez.

El reconocimiento a Patricia Rodríguez marcó uno de los muchos momentos emotivos que se vivieron ayer en Las Lagunas. Y es la joven recibió su premio del que fuera un día su maestro y hoy es alcalde Mijas, Antonio Sánchez.

Emocionado también estaba Juan Antonio González, profesor del instituto Puerto de la Torre de Málaga y responsable del grupo de alumnos premio nacional en la modalidad de taller más participativo de la Fundación Coca-Cola: "Reconocimientos como éste sirven para que la sociedad sepa que no sólo se puede aprender dando clases magistrales".

Josefina Martín, maestra de inglés del instituto Huerta Alta de Alhaurín de la Torre, premio nacional eTwinning con su proyecto "Through the glass" (a través del espejo), afirma que "lo que se premia, en definitiva, es la innovación en los procesos educativos".

"La innovación es la clave en la que debe sustentarse nuestra oferta educativa", explica Juan Carlos Orozco, director del instituto Mare Nostrum de la capital malagueña, galardonado con el segundo premio nacional de Bibliotecas Escolares. "Reconocimientos como este animan a trabajar en la misma línea", admite Juan Carlos Orozco.

En total, la Delegación rindió homenaje a 36 miembros de la comunidad educativa malagueña. Todos ellos recibieron una palomas de cerámica elaborada por alumnos del Centro Específico de Educación Especial Santa Rosa de Lima, de Málaga y con su actitud demostraron que la comunidad educativa está, sin duda, bien preparada.