Los andaluces se drogan menos. El consumo de todas las sustancias ha caído en los últimos tres años, lo que es una buena noticia, aunque la cocaína, que sigue siendo la preferida, cae pero de forma más pausada que el resto.

Así, el cannabis ha pasado del 9,5 al 7,4% respecto a 2007; se reduce también el consumo de alcohol, que cae del 82,7 al 81,3%. En menor medida ocurre algo parecido con la cocaína, cuyo abuso ha descendido en medio punto porcentual, del 3,1 al 2,6% de 2009.

Éstas son las principales conclusiones del undécimo estudio de prevalencia ´La población andaluza ante las drogas´, elaborado a partir de 2.250 entrevistas a ciudadanos de la autonomía de entre 12 y 64 años, realizadas a lo largo del pasado ejercicio. El análisis fue presentado ayer por Micaela Navarro, consejera para la Igualdad y el Bienestar Social, y la directora general de Atención a las Drogodependencias, Ana Gómez.

Ésta destacó que "ha habido un descenso importante en general" en el consumo de sustancias respecto a 2007, aunque ahora hay más fumadores, creciendo desde el 32,4 al 35,2%, pese a que también aumentan del 44,6 al 46,5 los individuos objeto de estudio que dicen no haber probado nunca un cigarrillo.

Desde 1987, el consumo de tabaco ha bajado en nueve puntos, del 44,1 al 35,2%, por lo que las campañas y la ley que prohíbe fumar en determinados espacios han servido "para una mayor concienciación y cada vez son menos las personas que se inician".

La droga ilegal más utilizada es el cannabis, aunque ha bajado un 2,1% y sólo el 7,4% de los encuestados dice haberla probado en los últimos seis meses. Según el estudio, el consumo de cocaína ha caído en medio punto, aunque se mantiene estable prácticamente desde 1987. También han caído el consumo de éxtasis –del 1,5 al 0,6%– y el de heroína, con un 0,1%. Éste sigue siendo residual.

La consejera, por su parte, ha valorado que se ha retrasado "ligeramente" la edad de iniciación en la mayoría de las sustancias, al situarse la del tabaco en los 16,8 años, la del cannabis en los 18, la de la cocaína en los 19, la de la heroína en los 20 y la de los tranquilizantes en los 25, y sobre todo en el alcohol, droga en la que se inician los andaluces a los 17,5 años.

Preguntada sobre si cree que la crisis económica ha influido en el descenso general, afirmó que lo desconoce.

Ha podido influir, pero un adicto es una persona enferma que "busca su dosis contra viento y marea", señaló. También atacó el hecho de que la cocaína se asocie al éxito profesional.