Los gestores del hotel Guadalmina de Marbella adquirirán Los Monteros, también en esta localidad, y que lleva meses cerrado y en concurso de acreedores, según pudo saber Europa Press.
Así, está previsto que hoy la jueza del juzgado de lo Mercantil número 2 de Málaga emita el auto de venta del establecimiento, lo que conllevaría la apertura de este hotel de cinco estrellas gran lujo y todo un emblema de la Costa del Sol.
Esta venta se cierra no sin complicaciones ya que la situación de Los Monteros ha hecho que la negociación sea muy lenta y compleja. Este inversor, que cuenta con capital extranjero y que procede del mercado hotelero, ha llegado a un acuerdo con las partes implicadas. Además, conoce el sector turístico marbellí; de hecho, apostó el pasado mes de abril por reabrir el hotel Guadalmina, otro de los señeros de la Costa del Sol.
El Guadalmina reabrió hace dos meses y medio con nuevo empresario y nuevo director y una estrategia basada en la innovación de la comercialización, la apertura indefinida superando la estacionalidad, la potenciación del producto de golf y deportivo y la consolidación de la excelencia en el segmento de sol y playa.
En mayo la jueza del juzgado de lo Mercantil número 2 de Málaga, que lleva el concurso de acreedores de tres de las cuatro empresas que conforman Los Monteros –Las Dunas Land SL, Inversiones Aljoda SL e Inversiones Dajoal SL–, firmó el auto que permitía a 65 trabajadores cobrar la prestación por desempleo después de llevar, entonces, 16 meses sin percibir sus salarios.
Los 65 trabajadores no conformaban la totalidad de la plantilla de este establecimiento marbellí –en total son un centenar aproximadamente–, que lleva unos dos años con dificultades, y que se agravaron después de que fuera comprado por el empresario ruso Ernest Malyshev en 2008.
La reapertura de Los Monteros supondría una buena noticia para el sector turístico después de años convulsos, más aún en un hotel de gran lujo como éste. Los Monteros obtuvo en el ejercicio de 2008 una facturación de 20 millones.
