Marbella se quedó ayer sin subasta por falta de pujadores. La multinacional de servicios inmobiliarios Richard Ellis se vio obligada a suspender su primera venta pública y presencial de bienes en la localidad malagueña.

Hasta el Palacio de Ferias y Congresos, se acercaron 56 interesados. En su mayoría, anglosajones. Pero no se inscribieron en el registro que les permite participar en el evento. «No tenían claro por qué vivienda decantarse», argumentó el director de la oficina marbellí de la compañía, Mark W. Clifford.

Tenían donde elegir en un catálogo de 30 inmuebles ubicados en la Costa del Sol y con importantes descuentos de entre el 20 y el 30% de su precio de mercado. Sus precios orientativos oscilan entre los 80.000 y los 950.000 euros.

Potenciar el mercado

CB Richard Ellis cuenta con una cartera de inmuebles que supera los 200 unidades en la Costa del Sol, según explicó a este diario Clifford. La idea de poner en marcha este tipo de ventas públicas, mucho más comunes en Gran Bretaña, es la de reactivar las compras en plena crisis económica.

La subasta de ayer será aplazada. Y, además, no será la única que se celebre en Marbella. «Queremos organizar una subasta cada dos meses», añadió.

La mayoría de las viviendas que promociona esta consultora están tomadas en exclusividad y proceden de propietarios privados en su gran mayoría. Pero también, son edificios de nueva construcción o productos adjudicados de entidades financieras.

«Para un propietario privado es difícil aceptar que el precio de su inmueble haya bajado», reconoce el director de la oficina marbellí.

Clifford defiende el método de la subasta para adquirir un inmueble, ya que lo considera una fórmula rápida pero sobre todo transparente para el demandante.

En estas ventas, es el propio comprador quien establece el precio que está dispuesto a pagar y tiene que regatear con su competencia. Todos ellos se enfrentan cara a cara cuando la subasta es presencial. Pero no es el único tipo.

Esta entidad internacional potencia las subastas ´online´ o a través de internet. En estos casos, las ventas se prolongan durante unas tres semanas. Mientras tanto, los interesados en adquirir un determinado inmueble tienen tiempo para visitarlo y hacer su reserva a través de la Red. Para ello, deben indicar el precio que pueden ofrecer por éste.

El número de viviendas vacías en la Costa del Sol y, en concreto, en Marbella es alto. De acuerdo con el nuevo Plan General de Ordenación Urbana, el municipio acumulaba 16.418 inmuebles deshabitados en 2001. Posteriormente, no han dejado de construirse promociones urbanísticas hasta que el sector entró en recesión. Así que unidades no faltan para hacer subastas.