Polémica en torno al gasto de la Diputación, la eficacia o no de las medidas de austeridad y la contratación de nuevo personal. El presidente de la Diputación, Salvador Pendón, confirmó ayer el comienzo de las gestiones para la contratación de un nuevo director de seguridad que supondrá un gasto extra al ente supramunicipal de 20.300 euros, ya que el actual –un funcionario– percibe 34.000 y el futuro 54.300 euros de retribución.
Una decisión que se produce a pesar del plan de austeridad iniciado por el organismo provincial que pretende contener y aminorar el gasto y que ha supuesto el recorte de los sueldos de los diputados y cargos de confianza, además de reducciones en dietas, parque móvil o nuevas medidas que se pondrán en marcha en un futuro próximo en torno a la utilización de coches oficiales o el uso de teléfonos móviles.
La medida centró el ataque y las críticas de la oposición. Para el portavoz del Partido Popular, Francisco Salado, el plan de austeridad de Pendón es «papel mojado» y, concretamente esta contratación es «innecesaria» ya que existe un jefe de seguridad. El popular demandó información de la marcha del plan de austeridad al no existir, dijo, una mesa de seguimiento que le permita conocer su evolución.
La respuesta del presidente de la Diputación, en la comparencia previa al pleno del organismo provincial, no se hizo esperar. Pendón defendió esta contratación cuyo fin, afirmó, es profesionalizar el puesto, para lo que se ha solicitado al Ministerio del Interior un funcionario en comisión de servicio que ocupe la plaza. Para el presidente del ente supramunicipal, aunque suponga un mayor gasto, conllevará a su vez una mejor utilización de los recursos.
Sobre los detalles de los resultados del plan de austeridad, Pendón dijo que en los primeros seis meses de 2010 (enero a junio) se ha logrado ahorrar respecto al año pasado 183.000 euros en parque móvil, 99.799 en contratos de sustituciones, en guardias de fines de semana, 38.000, y 46.000 en dietas (367.000 euros en total). A esto hay que añadir más de 7.300 litros de combustible y la tramitación de baja de cinco vehículos que supondrá un ahorro de 94.000 euros en los próximos dos años. A estas medidas se sumará próximamente, del 1 de julio al 31 de diciembre de 2012, un ahorro en telefonía de 1.100.000 euros (entre la renegociación del actual contrato con la compañía y las medidas de control del gasto, cuya primera tacada será la eliminación de 90 de los 383 móviles). Además, Pendón afirmó que se han planteado diversas alternativas para aplicar también ahorros en el uso de coches oficiales, una última medida que, comentó, se están aún barajando para ver cómo se articula.
