Los profesionales que intervienen en casos de abusos sexuales a menores deben coordinarse mejor para evitar una "victimización secundaria", ha manifestado hoy la directora de un curso sobre este tema que la Universidad Internacional de Andalucía (UNIA) celebra esta semana en Málaga, Julieta Moreno-Torres.

Según la también Asesora de Servicio de Protección de Menores de la Junta de Andalucía en la provincia, los agentes sociales, educativos, sanitarios y judiciales implicados en estos sucesos necesitan más formación sobre la labor del resto para que el menor no sea entrevistado sucesivamente por las diferentes instancias.

Cuando un niño sufre abusos sexuales, la intervención "debe ser mínima" y las entrevistas deben realizarse preferentemente por equipos psicológicos, ha declarado a Efe Moreno-Torres.

Entre estos agentes, ha destacado el papel de los medios de comunicación, quienes pueden incidir tanto en el estado del menor como en la investigación policial si no realizan un tratamiento adecuado de la información.

Esta jurista ha resaltado además la misión preventiva de los colegios, donde deben "hablar claro" a los niños sobre cómo deben comportarse cuando se les acerca un adulto desconocido, ya que los menores no son conscientes del abuso.

Esta circunstancia unida a que estos casos se producen "en gran parte de las ocasiones en el ámbito familiar" causa una ausencia de denuncias, ya que el abuso suele producirse en un contexto de autoridad por parte del educador o de un familiar y el menor no denuncia.

El curso de la UNIA "El abuso sexual a menores (prevención, protección y coordinación en la intervención) se celebra hasta el viernes en Málaga, con la intervención de psicólogos, sanitarios, policías y periodistas, entre otros profesionales.