El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, mantiene la fecha del 16 de julio para celebrar el pleno extraordinario en el que se apruebe por segunda vez el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) y poder remitirlo después a la Junta. Sin embargo, precisó que está abierto al diálogo con el Gobierno andaluz.

"Mantenemos nuestra fecha y al mismo tiempo mantenemos, permanentemente, nuestras puertas abiertas al diálogo; esa comunicación abierta ha estado y está", declaró hoy a los periodistas el alcalde malagueño.

De la Torre insistió en que "hubiera sido bueno que el PGOU se hubiera aprobado el año pasado, ya que alguna obrita más se hubiera hecho en Málaga". De hecho, el proyecto del planeamiento urbanístico volverá al pleno municipal para su aprobación provisional después de que la Comisión de Ordenación del Territorio y Urbanismo de Andalucía (Cotua) lo rechazara en julio de 2009.

Aunque desde entonces responsables municipales y de la Junta han trabajado para eliminar todos los proyectos que no se adaptaban al Plan de Ordenación del Territorio de la Aglomeración Urbana de Málaga (Potaum), parece que no hay acuerdo sobre las compensaciones que el Consistorio propone a cambio de hacerse cargo de la adquisición de los suelos de Arraijanal.

Los técnicos municipales llevaron el pasado jueves a Sevilla la propuesta del Ayuntamiento, que plantea que los suelos para los parques metropolitanos previstos en los márgenes del cauce de los ríos Guadalhorce y Campanillas, de propiedad privada, sean adquiridos por la Junta. Sin embargo, la viceconsejera de Obras Públicas y Vivienda, María Felicidad Montero, suspendió la reunión al conocer que había sido adelantada a la prensa.