Un libro analiza la desigualdad entre hombres y mujeres como uno de los factores causantes de la crisis económica y cómo ésta afecta más a la población femenina, por lo que advierte de que "no se puede salir de la crisis sin fortalecer las políticas de igualdad".

"Desiguales. Mujeres y hombres en la crisis financiera", que se presenta hoy en Málaga, sostiene que la crisis "no sólo se ha generado por factores inmediatos como las 'hipotecas-basura', sino también por los procesos de desigualdad en los últimos años", ha explicado hoy a Efe el economista Juan Torres, coautor junto a Lina Gálvez del libro, prologado por José Luis Sampedro.

"Se dice que la mujer soporta mejor la crisis, pero porque sólo se computa el trabajo pagado, y el trabajo doméstico aumenta", ha afirmado Torres, catedrático de Economía Aplicada de la Universidad de Sevilla.

Por ello, se produce una "sobrecarga de trabajo" para las mujeres, puesto que los hombres, incluso cuando están desempleados, "no se hacen cargo tanto del trabajo doméstico".

El hecho de que la desigualdad sea uno de los factores causantes de la crisis está relacionado "con las políticas que han reducido el gasto y han hecho que se genere menos ahorro".

Además, las mujeres tienen "una presencia mucho menor en el sector financiero, que ha tenido unos comportamientos agresivos que han generado la crisis financiera, por lo que se puede decir que es una crisis masculina", ha añadido Torres.

También ha apuntado que las denominadas "hipotecas-basura" proliferaron en los Estados Unidos porque se concedieron a colectivos como las mujeres, los hispanos y las personas de raza negra.

El libro, que será presentado por la directora del Instituto Andaluz de la Mujer, Soledad Pérez, revela además que, aunque tengan más rentas, las mujeres tienen menos acceso al crédito, y en Europa sólo el 3% de los créditos se conceden a la población femenina, situación que se agrava para las separadas, divorciadas o madres solteras.

Torres ha subrayado que, "sin políticas de igualdad, se ponen las piezas para fenómenos de crisis y de perturbación financiera", porque la igualdad "no es sólo una aspiración moral, sino también una razón de carácter económico".

"Desgraciadamente", ha agregado a Efe este catedrático, está ocurriendo "lo contrario", con una reducción del gasto social y políticas "muy masculinizadas".