La consejera de Obras Públicas y Vivienda, Rosa Aguilar, y el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, alcanzaron esta tarde el consenso necesario para desbloquear el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de la capital malagueña, de manera que pueda ser aprobado de forma definitiva.

Aguilar y De la Torre sellaron el acuerdo en la sede de la Consejería en Sevilla y se comprometieron a "establecer una colaboración entre la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento para mejorar la viabilidad técnica y económica del PGOU".

Por tanto, la Consejería de Obras Públicas y Vivienda y el Ayuntamiento de Málaga, tal y como informaron en un comunicado, dan por resueltas las diferencias sobre Arraijanal, donde la Junta prevé la construcción de un parque metropolitano, al considerar "ya pactada entre ambas administraciones su compensación dentro del área de reparto del suelo urbanizable".

Del mismo modo, se comprometen a establecer en el estudio económico financiero del PGOU que "las superficies correspondientes a la ampliación del parque fluvial del Guadalhorce y parte de los terrenos del encauzamiento del río Campanillas se obtendrán por expropiación del Ayuntamiento, como institución competente, afrontando su pago al 50 por ciento ambas administraciones".

El objetivo del Ayuntamiento es que el próximo día 16 se celebre un pleno extraordinario en el que se apruebe por segunda vez de forma provisional el PGOU y poder remitirlo así a la Junta de Andalucía para su visto bueno definitivo.

De hecho, el proyecto del planeamiento urbanístico volverá al pleno municipal para su aprobación provisional después de que la Comisión de Ordenación del Territorio y Urbanismo de Andalucía (Cotua) lo rechazara en julio de 2009.