Los secretarios generales de CCOO-A, Francisco Carbonero, y de la UGT-A, Manuel Pastrana, han coincidido en pedir al Ministerio de Economía que rectifique la decisión del Banco de España de adjudicar CajaSur a la BBK y han recordado que es él "el que tiene la última palabra" en el proceso.

En declaraciones a Efe, Carbonero ha afirmado que José Luis Rodríguez Zapatero "debe exigir" a la ministra Elena Salgado que haga una rectificación en el plazo legal que existe de "este gran error y gran perjuicio para los andaluces" ya que, si no es así, ha añadido, "(José Luis Rodríguez) Zapatero tendrá una gran deuda con Andalucía".

El líder de CCOO-A ha pedido tanto a Salgado como al gobernador del Banco de España, Miguel Angel Fernández Ordóñez, que expliquen el "porqué de las preferencias" por la caja vasca y ha señalado que espera que no suponga "un intercambio por apoyos parlamentarios del PNV, para que el Gobierno saque adelante los recortes sociales y laborales y los presupuestos de 2011".

Carbonero ha calificado la adjudicación como "muy mala noticia" para los andaluces, a los que "se les hace un expolio importante de sus ahorros" -ha dicho- y para los que se genera "una gran incertidumbre", además de la pérdida de un "patrimonio importantísimo" y de la posibilidad de fortalecer el sistema financiero y mejorar con ello la economía.

Por su parte Pastrana, en declaraciones a Efe, ha afirmado que "la noticia es tremendamente negativa" y ha calificado la decisión como una "jugada" del Banco de España, que "no ha tenido en cuenta en absoluto los requerimientos políticos ni los intereses económicos de Andalucía", actuando en contra de ellos.

Según Pastrana, el Ministerio de Economía tiene que demostrar "si va a seguir aislándose del clamor" que ha llegado durante la última semana desde Andalucía para que CajaSur se quedara en la comunidad, lo que demostraría, en su opinión, que "la ministra no está a la altura" de la importancia política, económica y social de la decisión.

El líder de la UGT-A cree que "se han impuesto los intereses monetaristas" del Banco de España, que ha tomado una decisión que supone "un golpe muy fuerte" al sistema financiero andaluz, y se ha preguntado "cómo los clientes de CajaSur van a acoger que sea una caja externa a la que a partir de ahora encomienden su dinero".