El año hidrológico que queda atrás se erige como el más lluvioso de la historia de Málaga, desde que se miden y recogen estos datos, con 977 litros por metro cuadrado de media en la provincia, según los datos facilitados por la delegada provincial de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, Remedios Martel.

El pasado jueves 30 de septiembre finalizó el año hidrológico y el nuevo comenzó ayer, uno de octubre, con los pantanos de la provincia al 82% de su capacidad total, es decir con 509,4 hectómetros cúbicos (frente a los 242,85 del año anterior). Las previsiones para este nuevo periodo son optimistas, de forma que «el otoño será más bien seco y el invierno de nuevo lluvioso», declaró Martel.

Desde que se recaban los datos de precipitaciones y agua embalsada en la provincia, es decir en 1995, este año que termina ha sido el más lluvioso con una media de 977 litros por metro cuadrado, mientras que precisamente en ese año fueron 971 litros. «El año hidrológico comenzó con algunos sistemas, como el del embalse de la Viñuela en estado crítico y ha finalizado con un acumulado de lluvias que supera la media de los años hidrológicos anteriores», indicó la delegada.

La media de precipitaciones del año anterior (de octubre de 2008 a septiembre de 2009) fueron 543 y la de 2008-2007, 498. La situación de las reservas de la provincia ha dado un giro radical tras un largo periodo de varios años de sequía en los que hubo que declarar incluso un decreto con medidas restrictivas para el uso del agua, recordó Martel.

«El año hidrológico ha sido muy favorable, realmente impresionante comparado con los anteriores. Nos permite haber afrontado las necesidades de consumo y uso de agua», explicó. El año que comenzó ayer también se presenta favorable. «Las reservas garantizan por supuesto el abastecimiento. Este verano ha aumentado un poco el consumo frente a lo previsto ante el repunte de turistas, pero no ha habido ningún problema», indicó. La delegada de Medio Ambiente realizó no obstante un llamamiento a la población, «precisamente porque sabemos lo que es pasar períodos largos de sequía, para que realicen un uso eficiente y responsable del agua».