El Ayuntamiento de Málaga no pondrá objeciones a la construcción de viviendas en la finca de La Platera, situada entre El Candado y la fábrica de cemento de La Araña, a pesar de conocerse que es una zona de riesgo por las cavidades, cuevas y galerías de antiguas explotaciones mineras que en el año 2000 provocaron un corrimiento del terreno que supuso la destrucción total o parcial de unas quince viviendas de la urbanización Montegolf.

La junta de gobierno local dio ayer el visto bueno a la aprobación inicial del plan de urbanización de La Platera, que tendrá un altísimo presupuesto de 12 millones de euros debido a los estudios geotécnicos que el Ayuntamiento exige a la propietaria del suelo, la empresa Financiera y Minera, a la que obliga a realizar una «auscultación en los viales y viviendas colindantes con la zona Oeste del sector, debiendo hacerse una lectura cero antes del inicio de las obras de movimiento de tierras y seguimiento posterior hasta su terminación», todo ello con el objetivo de «garantizar todas las medidas de seguridad para el desarrollo de esta zona».

A continuación, las obras de urbanización deberán trabajar en la retirada de antiguos rellenos, saneamiento de fondos de desmontes y apoyo de terraplenes, todo ello para disponer de una «cimentación adecuada».

Con todos estos elementos de prevención técnica, el Ayuntamiento permitirá el desarrollo urbanístico y residencial de la finca de 433.208 metros cuadrados, que posibilitará la construcción de unas 416 viviendas de lujo en la zona colindante a El Candado.

El proyecto prevé más de 230.000 metros cuadrados de zonas verdes. Habrá otros 30.000 metros cuadrados para equipamientos escolar, deportivo y social y 4.600 metros cuadrados para uso comercial.

Con la construcción de las 416 viviendas se dará salida a los propietarios de las casas que quedaron destruidas en el año 2000 por un corrimiento del terreno, mediante una solución sui generis. El Ayuntamiento accedió a que pasara a suelo urbanizable una parte de lo que era zona verde. Parte de ese nuevo suelo residencial, unos 13.000 metros cuadrados, servirá para reconstruir las viviendas de los vecinos de Montegolf y el resto permitirá aumentar el techo edificable y el número de viviendas para que los promotores no pierdan.

El desarrollo urbanístico de esta zona se realizará en dos fases. La primera, a ejecutar entre los próximo 4 a 8 años, con la ejecución de las viviendas antes mencionadas, colegios y comercios colindantes a la urbanización del Candado. En esta fase se obliga a reforestar con plantas autóctonas no sólo la zona colindante a la citada urbanización, sino más de los 90.000 metros cuadrados de parque que se ubican al otro lado de la autovía colindante con la depuradora y la urbanización Villazo Bajo, según la documentación aportada por la Gerencia de Urbanismo.