Nueva bronca política en la Diputación, en este caso con un sistema energético como protagonista. El presidente del organismo provincial, Salvador Pendón, admitió ayer que el equipo de gobierno ha gastado 2,5 millones de euros en esta técnica que lleva cuatro años sin funcionar. Pendón afirmó, no obstante, que se trata de una iniciativa pionera en Málaga que ha tenido que atravesar y solventar diferentes problemas técnicos, y aseguró que confía en que en el menor tiempo posible entre al fin en funcionamiento.

Este sistema está basado en la trigeneración, un procedimiento por el cual a partir de una energía primaria, en este caso gas, se obtiene frío, calor y energía eléctrica para el propio abastecimiento de la institución y la posterior venta del sobrante, lo que además generaba, según esos estudios previos, unos beneficios anuales de cerca de un millón de euros. La instalación de este proceso comenzó hace cuatro años pero las exigencias de la Junta y las consiguientes adaptaciones técnicas a éstas han demorado de forma considerable la puesta en marcha, según la Diputación. Una vez superadas estas trabas actualmente, el escollo, según explicó Pendón, reside en el hecho de que Endesa –que compraría el excedente de energía– exige una serie de canalizaciones cuyo coste es de 120.000 euros y que por contra los técnicos del organismo provincial no estiman necesarios.

«Ahora estamos en esas conversaciones con Endesa, que será la que adquirirá la energía. Estamos ya en el tramo final de la puesta en marcha del sistema que esperamos que se produzca en el menor tiempo posible», declaró Pendón, que aseveró no obstante que el gasto realizado no llega siquiera a la mitad de lo denunciado por el PP.

Y es que la polémica arrancó el pasado lunes cuando el portavoz el PP en el ente supramunicipal, Francisco Salado, acusó al equipo de gobierno de haber gastado ya 6,5 millones de euros entre maquinaria y mantenimiento en este proyecto. «Tras cuatro años no han sido capaces de ponerlo en marcha y ese sistema energético se ha convertido en una falacia y una pantomima», criticó Salado antes del comienzo del pleno de ayer donde solicitó una comisión extraordinaria para abordar el asunto que fue rechazada por el gobierno, que consideró que este punto se puede incluir en las comisiones ordinarias.

La portavoz de IU, Encarnación Páez, formación que gobierna la institución junto con el PSOE, admitió también que este sistema no ha funcionado por el momento, una cuestión que dijo le «preocupa». Pero Páez fue más allá y afirmó que la sostenibilidad y el ahorro energético son unos de los principios del acuerdo de gobierno entre PSOE e IU y, «por ahora, el sistema ha fallado y se está incumpliendo ese principio».