La Sección Octava de la Audiencia Provincial juzga estos días a tres hombres a los que acusa de violar en dos ocasiones a una prostituta a la que raptaron a punta de pistola del lugar en el que ejercía, el polígono Guadalhorce, para robarle después. En concreto, el fiscal, que expondrá en la sesión de hoy sus conclusiones finales, solicita para cada uno 29 años de cárcel (87 en total) por dos delitos de agresión sexual y un ilícito de robo con violencia.

Según consta en la calificación fiscal, a la que tuvo acceso La Opinión de Málaga, a las 23.15 horas del 14 de noviembre de 2006, una mujer rusa se encontraba ejerciendo la prostitución en el polígono industrial Guadalhorce, cuando un coche, conducido por los acusados M. A. P. A. y F. S. G., se paró junto a ella. Sus ocupantes le preguntaron cuánto cobraba por servicio, llegaron a un acuerdo y la chica accedió a subir al automóvil.

Acto seguido, estacionaron en un aparcamiento cercano, momento en el que F. S. G. «sacó un arma de fuego que puso en el cuello de la mujer, diciéndole: Cállate, ahora vas a hacer lo que te digamos o si no te matamos, advirtiéndole de que no intentara huir, pues otro coche les seguía», explica el fiscal en sus conclusiones provisionales.

Cambio de escenario

Efectivamente, tras ellos iba un coche conducido por A. F. M. Los dos automóviles iniciaron la marcha y se comunicaban entre sí por medio del móvil de la joven, llegando hasta los alrededores de la venta de San Cayetano, ubicada en el Puerto de la Torre.

Una vez detenidos, F. S. G. «le ordenó que se quitara toda la ropa, rogando ella que usara preservativo o que la mataran».

El presunto agresor accedió a protegerse, «siendo ella penetrada vaginalmente contra su voluntad», mientras los otros dos los miraban desde fuera, «apuntando A. F. M. con otra pistola», siempre según la literalidad del escrito de la acusación pública.

Después, hizo lo mismo A. F. M., quien también se puso el correspondiente preservativo, aclara el acusador.

Mientras tanto, «registraban su bolso y se apoderaron de 100 euros, de dos tarjetas de crédito y de un teléfono Nokia». Poco después, acudieron a varios cajeros de la calle Lope de Rueda, en el Puerto de la Torre, «e intimidaron a la víctima con las armas hasta conseguir el número PIN de su tarjeta». A. F. M. la usó en tres entidades bancarias distintas, realizando todas esas operaciones alrededor de las 1.00 horas de la madrugada.

En total, extrajo presuntamente más de 500 euros, para sacar después, a las 1.36 horas, 100 euros más en una entidad de la barriada de Santa Rosalía.

Los hechos han sido calificados como dos delitos de violación y uno de robo con violencia que se atribuyen a los tres encausados por igual, concurriendo en dos de ellos la agravante de reincidencia. Asimismo, M. A. P. A. y A. F. M. tienen antecedentes por robo y por robo con violencia e intimidación, respectivamente. El juicio oral quedará hoy visto para sentencia.