La creación de un parque en los antiguos terrenos del Campamento Benítez ha vuelto a empantanarse. En este caso por las exigencias del Ministerio de Fomento como condición obligada para habilitar esta zona verde en los 280.000 metros cuadrados de la antigua zona militar. La Gerencia Municipal de Urbanismo ha estimado que las pretensiones de una compensación por parte de Fomento tendría un coste de 76 millones de euros para la ciudad. Un dinero que se aportaría en parcelas al Ministerio, en concepto de los aprovechamientos urbanísticos derivados de no edificar en ese suelo.

El borrador del convenio, que el miércoles envió Fomento al Ayuntamiento de Málaga, es muy claro en ese punto y considera como «condición obligada» esa compensación, que argumenta que está en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU). No obstante, el documento urbanístico detalla el suelo como equipamiento ya conseguido.

De hacerse efectiva se daría una situación que rozaría el absurdo económico, ya que Fomento invertiría 5 millones de euros y la Junta de Andalucía otros tres millones, para ejecutar el parque que ha propuesto con un presupuesto de 8 millones de euros. A cambio, el Ministerio de Fomento recibiría del Ayuntamiento de Málaga una compensación en parcelas de la que podría sacar un beneficio de 76 millones de euros.

A esta cifra habría que unir el gasto anual que supondría para las arcas municipales el mantenimiento del parque del Campamento Benítez. Ese es otro de los puntos que separan al Ministerio de Fomento y al Consistorio para lograr un acuerdo. El Ejecutivo plantea en el convenio que la nueva zona verde tenga consideración de parque periurbano, lo que equivale a que la ciudad asuma el coste de su mantenimiento pero no acceda a la propiedad del suelo, ya que sólo se cedería en régimen de concesión administrativa durante 75 años.

El Ayuntamiento, en cambio, insiste en que el parque tenga un carácter metropolitano, por beneficiar también a los municipios del entorno. Este cambio supondría que el mantenimiento correspondería a la Junta de Andalucía.

Junto a la compensación en suelo y el mantenimiento del parque, el borrador de convenio plantea también que el Ayuntamiento renuncie a sus pretensiones de obtener la propiedad del suelo y que se encuentra actualmente dirimiéndose por vía judicial.

El alcalde acusa a Fomento de tomarle el pelo

El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, se mostró ayer indignado con el borrador del convenio, que tachó de «impresentable, inaceptable y tomadura de pelo», dejando claro que el Ayuntamiento no participará en este proyecto a no ser que el departamento dirigido por José Blanco «haga otro documento y se olvide del concepto de aprovechamientos».

De la Torre advirtió de que «el punto del aprovechamiento no es negociable», acusó a Fomento de «querer hacer negocio con la ciudad» y de plantear una inversión «bastante baja en comparación con la que los técnicos opinan que necesita un parque de las características que debe tener éste, metropolitano y con la posibilidad de ser un parque botánico», estimada entre 15 y 18 millones.