La exalcaldesa de Marbella Marisol Yagüe ha negado que haya influido en el curso del procedimiento de un atestado policial sobre una infracción de tráfico que posteriormente fue sustraído de las dependencias municipales.

Por su parte, el fiscal pide que Yagüe sea condenada a nueve meses de inhabilitación para empleo y cargo público por un delito de omisión del deber de perseguir delitos en una causa de supuesta sustracción de atestados de tráfico en la Policía local.

Durante su declaración, Marisol Yagüe ha negado su participación en los hechos y ha asegurado que ella nunca se "metió" en la instrucción de ningún atestado y "menos llamando a un policía local".

La procesada está siendo juzgada hoy en la Sección Novena de la Audiencia Provincial de Málaga y en el banquillo de los acusados también están sentados cuatro agentes locales, entre ellos el exjefe de la Policía Local Rafael del Pozo.

Presuntamente, Marisol Yagüe llamó a un policía local para interesarse por un asunto de supuesta infracción de tráfico en el que estaba implicado un sobrino del periodista deportivo José María García.

Según la acusación, Marisol Yagüe llamó al agente para ver si se podía parar el asunto, extremo que ha negado la exalcaldesa, que ha destacado que "nunca ha hecho algo así".

"Jamás he llamado a un policía local para interesarse por un asunto", ha asegurado la acusada, que ha explicado que "no entiendo por qué estoy aquí, bueno si, por haber sido alcaldesa de Marbella", ha apuntado.

En este sentido, Yagüe ha añadido que además no sabe como iba a llamar a un policía local que no conoce, y que no sabe su móvil personal y, que en tal caso, hubiese llamado a su superior para conocer el asunto, pero nunca para influir en un procedimiento.

Marisol Yagüe y Rafael del Pozo también están imputados en el caso Malaya, la operación contra la mayor trama de corrupción conocida en un ayuntamiento en la historia de España y que actualmente se está juzgando en la Audiencia Provincial de Málaga.

El exjefe de la Policía Local, que también ha negado su participación en los hechos, se enfrenta a tres años de prisión, siete de inhabilitación y multa de 13.500 euros por un delito continuado de omisión del deber de perseguir delito en concurso con otro, también continuado, de infidelidad en custodia de documentos.

Este caso fue instruido en el Juzgado de Instrucción número 4 de Marbella y se investigó la desaparición de tres diligencias completas que supuestamente se retrajeron de la acción judicial por parte del inspector Francisco Javier Martín.

El inspector, también imputado en esta causa y responsable directo del área de atestados, en marzo de 2006, el mismo día en el que se registró la Jefatura de la Policía Local de Marbella por el caso Malaya.

El inicio de la causa judicial tiene su origen en una comparecencia en los juzgados de un agente de la Policía Local de Marbella al que Martín habría supuestamente entregado una documentación en un sobre cerrado el día del registro de la Jefatura por el caso Malaya.

Dicha comparecencia se produjo después de que el agente, en el momento en que tuvo constancia del contenido del sobre, lo pusiera en conocimiento de sus superiores, que comprobaron que las diligencias contenidas no estaban tramitadas, por lo que avisaron a la autoridad judicial ante la posible gravedad de los hechos.

Tras la instrucción del caso, el fiscal entiende que se intentó ocultar tres atestados policiales en 2004 y 2005, uno de ellos por malversación y falsificación, abierto contra un empleado del depósito municipal en mayo de 2005.

Los agentes policiales han negado haber ocultado los atestados y han asegurado que nunca recibieron ordenes de Yagüe para que paralizara ningún asunto, solo uno de ellos ha explicado que si hubo un compañero que le contó que la exalcaldesa le llamó por el asunto del sobrino del periodista, pero que él no escuchó la conversación.