A pesar de que únicamente han trascurrido unos días desde el inicio de la temporada alta, el turismo empieza a refrendar las buenas impresiones apuntadas durante la primavera. El sector, pendiente como cada año de las reservas de última hora, se prepara para un fin de fiestas que, si bien no suena apoteósico, podría marcar la entrada en septiembre de la esperada recuperación económica. La industria se conjura para que continúe la tendencia al crecimiento en todos los segmentos, incluidas las alternativas al sol y playa.

Es el caso del turismo rural, que empieza a despedirse de los retrocesos consecutivos de los últimos años. Según Monsalud Galindo, portavoz de Rural Andalus, el sector se ha reconciliado con los números positivos en Andalucía y la provincia de Málaga. Los datos del recién finalizado primer semestre así lo avalan. La facturación ha crecido un 7,8 por ciento y las expectativas para los próximos meses es que el movimiento alcista se mantenga, aunque actualmente continúa siendo una incógnita.

Rural Andalus, por ejemplo, confía en que los buenos resultados se extiendan al verano, pero admite que la demora en la planificación de los viajes, especialmente pronunciada entre el público nacional, no permite establecer previsiones. El turismo rural tiene su propio lenguaje y éste habla tradicionalmente de un verano dividido entre la demanda de agosto y la inestabilidad de julio y septiembre. «Aun es pronto para saber cómo se comportará el verano, pero esperamos que el crecimiento continúe», resalta Galindo.

Lo que no plantea demasiadas dudas son las preferencias de los turistas, que este año apuntan con especial sensibilidad hacia la comarca de la Axarquía. Se impone el formato de casa con piscina en entornos rurales, aunque cercanos a la playa. Sobre todo, entre los extranjeros, que cada vez se decantan más por este tipo de productos. No obstante, sin que eso suponga un menoscabo a destinos consolidados entre las predilecciones de los turistas como el valle de Genal. «En esto no hay demasiados secretos. Los turistas buscan la cercanía de la playa, de los ríos o de los parques naturales, de la naturaleza, en suma», precisa.

Monsalud Galindo señala, sin embargo, que este año la oferta plantea una novedad que se ha convertido en un valor añadido por los municipios colindantes. Se trata de Júzcar y su iniciativa pitufa, que va camino de convertirse en un imán para la comarca . «Para los que quieren turismo rural supone un nuevo estímulo, especialmente para los niños», comenta.

En cuanto al perfil predominante este año, la experta vuelve a señalar a las familias, que agarran el testigo dejado durante los puentes por pandillas de amigos o, incluso, compañeros de trabajo. Por nacionalidades, los más numerosos, al igual que el resto de segmentos, son los españoles, aunque también destacan los holandeses, que ya superan a los alemanes, tradicionalmente solícitos a la oferta de la provincia. Además, empieza a subrayarse la presencia de turistas francesas,a los que el segmento rural también convence. Los síntomas, esta vez, no indican una enfermedad, sino el restablecimiento de la salud. En todos sus frentes.

Las cifras

+7,8%

Mayor rentabilidad

Los establecimientos de turismo rural han incrementado su facturación un 7,8 por ciento en los primeros seis meses del año, lo que lleva a la industria a conjeturar con un verano positivo en el sector, también afecto a la crisis en las últimas temporadas de verano.

20%

Rebaja por venta anticipada

Las ofertas planteadas por el sector para evitar la tendencia a las reservas de última hora han superado este año, en algunos casos, hasta el veinte por ciento. El efecto, sin embargo, no ha sido el esperado, especialmente entre el público español.

Perfil

Familias en busca de naturaleza

El turismo de interior encuentra su público dilecto para el verano en el mercado familiar. Los productos más demandados son casas con piscinas, preferentemente ubicadas cerca de la playa o de atractivos paisajísticos como los ríos, las lagunas o los parques naturales.

Cádiz y Jaén, líderes de mercado

El interior de Málaga comparte su liderazgo en el mercado con otros destinos situados en la provincia de Cádiz y en la de Jaén, especialmente en lo que respecta al complejo natural de la sierra de Segura, Cazorla y Las Villas. A nivel provincial, los puntos más señalados son la comarca de La Axarquía, de la que se valora su proximidad con el mar y con el campo y el valle del Genal, reforzado ahora por el «pueblo pitufo».