La rectora de la Universidad de Málaga, Adelaida de la Calle, presentó ayer su candidatura a la presidencia de la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE). Dado que es la única persona que opta al cargo, se convertirá en la primera mujer que dirige la entidad cuando se celebren las elecciones que tendrán lugar el próximo 13 de octubre.

Adelaida de la Calle es rectora de la Universidad de Málaga (UMA) desde el año 2004. Licenciada en Ciencias Biológicas en 1972 por la Universidad Complutense de Madrid, es catedrática de Biología Celular en la UMA desde el año 1999. El próximo día 13 de octubre será elegida presidenta de la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas, siendo la primera mujer que estará al frente de esta entidad.

El nuevo cargo que ocupará supone un gran reto tanto profesional como personal.

Totalmente. Uno hace las cosas porque cree en ellas y porque su trayectoria le lleva por esos caminos, pero personalmente también es un reto muy importante. En este caso, el reto de Adelaida de la Calle tiene que ir ligado al de rectora de la Universidad de Málaga. Lo veo como un proyecto muy ilusionante.

¿Qué le llevó a tomar la decisión de presentarse?

Es una decisión importante, porque es asumir una responsabilidad en la que los intereses se generalizan a nivel del sistema universitario español y, por lo tanto, tiene su responsabilidad, sobre todo en este momento difícil que estamos pasando todos los españoles e instituciones como la Universidad.

Cuando sea oficialmente nombrada presidenta de la CRUE, ¿cuál será la primera medida que ponga en marcha?

Es muy difícil, porque voy a salir en un momento crucial en el que España está en una situación política muy llamativa. La CRUE se está entrevistando con los distintos candidatos a la presidencia del Gobierno y, probablemente, para ese día ya hayamos dialogado con los dos partidos más potentes. Pero mi idea es seguir hablando con ellos y exponerles hacia dónde quiere ir la Universidad española y cuál es el papel que debe jugar en unas circunstancias, que no son las más favorables para pedir pero probablemente sean las más favorables para dar. Por eso seguiré reclamando a cualquier líder que apueste por un presupuesto adecuado en las universidades y en la educación en general. Es responsabilidad del Estado y de las comunidades el seguir apostando por la Universidad pública.

¿Cuáles son los principales ejes de su programa?

El lema es Juntos, pues juntos (Universidad, empresa y Gobierno) podremos ser más productivos, más competitivos y más internacionales. Así, uno de los objetivos es acercar la Universidad a la sociedad y potenciar las salidas laborales de los estudiantes. Quizá ese sea el mayor reto. A los rectores nos preocupa pensar que estamos formando a los profesionales del futuro, pero ese futuro debe ser inmediato, porque salen los estudiantes y deben tener un puesto de trabajo en la sociedad.

¿Cómo cree que puede potenciar las salidas laborales?

Hemos de actuar con todos los agentes sociales y firmar convenios con organizaciones empresariales, parques tecnológicos y grandes empresas para interactuar con ellos con el criterio de empleabilidad más amplio.

¿Hay ya convenios concretos diseñados?

Tenemos actuaciones muy diseñadas con la Cámara de Comercio de Málaga y con la Confederación de Empresarios de Málaga (CEM). Ahora se trata de llevarlos a los órganos de máxima representación. Y eso es lo que vamos a hacer. Con los parques tecnológicos de Andalucía y de Cartuja ya tenemos convenios y desarrollamos actuaciones, pero lo que queremos hacer con la Asociación de Parques Científicos y Tecnológicos es lograr que se apoye la empleabilidad de los estudiantes, facilitar el autoempleo y crear empresas. Queremos implicar también a las grandes empresas del país y tener la posibilidad de interaccionar con ellos al más alto nivel.

¿Qué respuesta está encontrando en esos primeros contactos con el Gobierno?

Muy receptiva, yo creo que cualquier líder político lo conoce y sabe que apostar por el conocimiento es la única apuesta segura, pues significa apostar por la educación, las personas y la investigación, lo que en el fondo es apostar por un cambio en el tejido productivo del país aumentando su competitividad.

Se habla de recortes en el sistema educativo....

Yo creo que en estos momentos de crisis y de cierto nerviosismo político se dicen cosas, pero pienso que cualquier político sabe que la Universidad pública tiene que seguir funcionando y que hay que aumentar la financiación tanto en docencia como en investigación. Creo que es responsabilidad del Estado y de las comunidades autónomas seguir apostando por la Universidad pública.

¿Confía en que podrá conseguirlo?

Creo que lo conseguiré. Gracias a mi dilatada experiencia en la gestión de la UMA y en la CRUE, he visto cómo nos hemos ido moviendo en ese ámbito y se han generado muchas oportunidades para la universidad española y, en concreto, para la UMA. Creo que he hecho crecer a la Universidad española y malagueña en visualización que es lo que hace que se nos valore. Estaremos en los rankings mejores cuando tengamos la posibilidad de tener los presupuestos mejores, pero mientras tanto caminaremos. El dinero no puede ser causa justificada de que no se pueden hacer cosas, pues por encima de los bienes económicos está el talento y en esta Universidad sobra.