Las medidas que tienen como objetivo un futurible bien común no siempre son del gusto del consumidor final. Es lo que ocurrió con el canon del agua que la Junta ha impuesto a los ayuntamientos para financiar obras de infraestructuras en la comunidad y que en toda Andalucía se está aplicando desde el pasado mes de mayo y ha supuesto, de media, subidas en los recibos de entre el 8 y el 30%, dependiendo del municipio, según la información aportada por este periódico por los consistorios de la provincia.

La tasa se ha aplicado, no obstante, de distinto modo y supone diferentes costes, según el municipio de residencia, aunque muchos cobran un euro fijo al mes, más una cuota variable en función del consumo final. Es el caso de la capital malagueña, con un precio único para los usos no domésticos (0,25 euros por metro cúbico) y 3 tramos para los usos domésticos, según informaron fuentes de Emasa, que explicaron que la subida en el recibo se mueve entre el 8% y el 15%, dependiendo del consumo y del año de aplicación –el canon se va incrementando anualmente–.

En Vélez, la aplicación del canon andaluz ha supuesto un aumento que se acerca al 10%. El consumo medio se incrementa en cerca de 5 euros, lo que ya se refleja en la factura bimensual que se emite. Similar es el caso de Rincón de la Victoria donde el recibo ha generado una subida en torno al 8% en el consumo, gastando una media de 5,78 euros. En Marbella, en una factura media, propia de una familia de tres o cuatro miembros y con un consumo de 20 metros cúbicos al mes, la subida es de alrededor de dos euros mensuales, el mismo incremento que se ha registrado en Alhaurín de la Torre en las facturas trimestrales. En los municipios vecinos de Coín y Alhaurín el Grande el aumento ha sido de tres euros y un euro, respectivamente.

En Nerja y Torrox aplican desde el pasado mes de mayo el canon de mejora de infraestructuras hidráulicas tipificado por la Junta de Andalucía. A través de la empresa concesionaria del suministro en ambos municipios, la subida fija de un euro mensual por recibo se complementa de media con alrededor de 25 céntimos mensuales en función del consumo. Los responsables técnicos alertan de que habrá una revisión de esas cantidades a finales de año. La entrada en vigor del canon andaluz del agua supuso de media un incremento aproximado del 6% en el gasto mensual de cada hogar. En Benalmádena, la subida, por su parte, ha sido del 12,6%, un porcentaje que en Fuengirola aseguran que llega al 30%. Y en Antequera, el canon ha hecho, que de media, las facturas se vean incrementadas de tres a cinco euros, teniendo en cuenta que el cargo del agua llega de forma bimensual.

Aunque los consistorios estén aplicando obedientemente la tasa, no todos lo hacen a gusto. Y es que el canon fue recibido con una fuerte contestación, especialmente por las administraciones gobernadas por el PP. De hecho, en Alhaurín de la Torre el Ayuntamiento envió una carta a todos los contribuyentes informándoles de que esta subida se debía a una obligación impuesta por la Junta. La alcaldesa de Fuengirola, Esperanza Oña, también ha criticado duramente esta medida en múltiples ocasiones asegurando que la medida tiene un alto afán «confiscatorio» y, por su parte, el portavoz del Gobierno de Mijas, Mario Bravo, califica la medida como «la forma más fácil de recaudar». «Lo más sencillo es pedirle a los ciudadanos que se rasquen el bolsillo para recaudar más», criticó.

Mientras, las fuentes municipales consultadas por este periódico resaltaron, entre los aspectos negativos del canon, que la Junta de Andalucía «cobra a las entidades suministradoras el 100% de lo facturado, independientemente de si el ciudadano ha pagado o no su factura, lo que genera sobrecostes importantes en la cuenta de resultados de las empresas». Asimismo, recalcaron que la inclusión de esta tasa en las facturas «tiene costes tanto administrativos como de cambios en los sistemas informáticos que las entidades suministradoras hemos tenido que asumir sin que hasta la fecha la Junta los haya asumido».

Los ayuntamientos tienen que entregar a la Junta la recaudación íntegra del canon y, como ocurrió en la capital, con la entrada en vigor de éste tuvieron que eliminar los que ya existían para financiar obras.

Información elaborada por:Miguel Ferrary, Princesa Sánchez, Carmen Romera, Ana García, José Luis Jiménez, David Sierras, Fran Extremera y Juanjo Zayas.