Las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de muerte en todo el mundo. Engloban diferentes patologías relacionadas con el corazón y los vasos sanguíneos (cardiopatías coronarias y enfermedades cerebrovasculares). En España existen aproximadamente un millón de pacientes que toman tratamiento anticoagulante oral (TAO) de forma crónica, representando el 1,5% de la población global y con un crecimiento anual del 15 %.

¿Cuántas personas anticoaguladas existen en la provincia de Málaga?

Existen entre 28.000 y 30.000 personas anticoaguladas. Están subiendo de forma bastante alarmante en los últimos años. El pasado 1 de diciembre celebramos el Día Nacional del Paciente Anticoagulado y Coronario y nos centramos en el ictus, su prevención y en los cuidados y el autocuidado del paciente anticoagulado.

¿En qué consiste ese autocuidado en este tipo de pacientes?

El paciente anticoagulado es aquel que ha sufrido un ictus, una embolia, una trombosis, que le han realizado un cambio de válvula... Normalmente tiene una medicación y un tratamiento de por vida. El objetivo del tratamiento anticoagulante oral es la prevención de la enfermedad tromboembólica. En la asociación, que lleva trabajando en Málaga desde 1996, le formamos e informamos acerca del autocuidado, lo que redundará directamente en la calidad de vida de la persona. Le proporciona más independencia, seguridad y fiabilidad. Con esto evitamos que se produzcan episodios cardiovasculares de riesgo. Trabajamos de la mano con los hospitales y sus especialistas y somos pioneros en España en autocuidados.

¿Cómo se controlan estos pacientes?

El tratamiento con anticoagulantes orales requiere controles analíticos periódicos con el fin de conocer la intensidad del efecto anticoagulante y el ajuste de la dosis del fármaco. Nosotros tenemos un aparato que se llama coagulómetro y que mide nuestro rango. Por ejemplo para los valvulares el rango es de 2,5 a 3,5, o para un enfermo que haya sufrido una trombosis de 2 a 3. Te mides la densidad de la sangre y si no está en los niveles subo o bajo la dosis diaria de la medicación. En el programa de autocontrol enseñamos al paciente junto a los profesionales de Carlos Haya, el Clínico y el hospital Quirón a controlarse.

Han centrado la campaña de este año en el ictus...

El ictus es un trastorno brusco de la circulación cerebral. En los últimos 25 años se ha conseguido ir reduciendo el número de ictus y se ha bajado hasta en un 50% su mortalidad. Es necesario conocer algunas posibles señales ante las que estar en alerta. Si se detecta que no se puede hablar normalmente, se produce una parálisis en media parte de la cara, un dolor en la cabeza brusco y fuerte, si se observa que no se puede caminar porque faltan fuerzas o la persona no puede levantar las manos, o si se está pensando una cosa y se dice otra porque no puedo coordinar, son algunas de las alertas. A la mínima señal es preciso acudir inmediatamente al hospital. Se pueden evitar incluso muertes.

¿Qué reclama el colectivo?

Necesitamos que las administraciones nos ayuden y nos apoyen mucho más. Ahora estamos atravesando una época bastante mala. Lanzo un SOS diciendo que si nosotros ayudamos a todos los pacientes, formándolos, y propiciando el autocuidado aliviando al sistema sanitario y beneficiando al enfermo, debemos recibir más ayuda de esas administraciones. También pedimos la colaboración de todos los malagueños para que nos apoyen y a toda persona que tenga esta patología decirle que se acerque a la asociación porque podemos ayudarle (952 61 87 78).