La telemedicina avanza y Málaga se sube al carro del progreso y de sus beneficios prácticos. El control remoto de pacientes permite y facilita el seguimiento del enfermo de forma detallada e incluso más precisa. Actualmente 550 enfermos operados de corazón forman parte de un pionero programa que desarrolla el Hospital Clínico y que supone unas notables mejoras en la comodidad y la calidad de vida del paciente pero, sobre todo, consigue disminuir el tiempo de reacción ante una situación de emergencia, vital para estas patologías.

Hace ya más de tres años que el Virgen de la Victoria comenzó a desarrollar este programa de telemedicina que se aplica a pacientes que portan desfibriladores, marcapasos y resincronizadores cardíacos. Con este sistema se llevaron a cabo en 2011 más de 7.000 consultas virtuales online. Se trata de una transmisión de datos desde casa. El paciente cuenta con un módem que debe encender y que a su vez su marcapasos, desfibrilador o resincronizador busca para enviarle las señales que son transmitidas al hospital.

Esta atención aumenta la comodidad y la calidad de vida del enfermo pero, sobre todo, agiliza el tiempo de respuesta ante episodios de riesgo y tiene un efecto directo de mejora del pronóstico, explicó ayer el responsable de la Unidad de Arritmias, Javier Alzueta.

«Entregamos un módem al paciente que es el que nos traslada la información. Tenemos monitorizado al enfermo y el dispositivo marca alarmas y nos avisa de situaciones como el agotamiento de la batería o la presencia de arritmias o de parámetros relacionados con esa insuficiencia cardíaca», explicó el experto. El propio sistema avisa ante las alertas que los profesionales van consultando.

Aumentan las arritmias. Es considerada la epidemia arrítmica del siglo XXI y los casos van en aumento. La fibrilación auricular es el tipo de arritmia más frecuente entre la población y se estima que 25.000 malagueños la padecen. Concretamente, entre el 2% y el 3% de los ciudadanos pueden estar afectados por esta dolencia, un porcentaje que se eleva al 4% a partir de los 40 años y al 15% de los 75 en adelante, explicaron Alzueta y el jefe de servicio de Cardiología, Eduardo de Teresa. En este aumento de casos incide el envejecimiento de la población; que haya más detección, a causa de los avances; y, otros factores como la hipertensión. «Es una patología muy frecuente que cada vez se da más en gente joven y en personas sanas», dijo Alzueta.

La gravedad de este padecimiento radica en que este tipo de arritmia aumenta la frecuencia cardíaca y puede desencadenar en una embolia o un ictus. En este punto el experto señaló y aclaró que no debe encenderse la señal de alerta ante cualquier palpitación. «Cerca del 50% de la población puede tener una arritmia y no pasa nada».

Pero, entonces, ¿cuáles son los síntomas ante los que acudir al especialista? Palpitaciones -molestias en el ritmo cardíaco-, cansancio, falta de aire, mareos o pérdida de conocimiento son algunas de las señales. Se puede producir incluso la muerte súbita. La fibrilación auricular se asocia también a los deportistas, debido a su menor frecuencia cardíaca.

La técnica. El hospital Clínico emplea una técnica -ablación de fibrilación auricular- cuyos resultados son especialmente positivos con un 70% de éxito. Consiste en la aplicación de calor (radiofrecuencia) o frío (crioablación) para anular los impulsos eléctricos que no funcionan de forma correcta en el corazón.

El Hospital Clínico se sitúa como pionero en el tratamiento de las arritmias cardíacas con la técnica de la ablación. Es uno de los cuatro hospitales del país que supera las trescientas ablaciones al año. En 2011 la Unidad de Arritmias realizó 375 técnicas de ablaciones cardíacas, de las que cien de ellas se llevaron a cabo en fibrilación auricular. Hoy y mañana, 400 profesionales hablarán sobre el tema en la X Reunión Nacional sobre Arritimias Cardiacas, en Marbella.