El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, dejó caer el martes ante varios periodistas que había una cierta intencionalidad política en el que hecho de que la Fiscalía enviase al juzgado decano el expediente del caso Porras por supuestas adjudicaciones irregulares sólo un mes antes de las elecciones andaluzas. La réplica le ha llegado del presidente de la Audiencia Provincial, Antonio Alcalá, quien aseguró ayer a este periódico: «No existe intencionalidad política» en la reactivación de esa causa.
El PSOE denunció a la Fiscalía supuestas irregularidades en la adjudicación de contratos menores del área que dirige la concejala Teresa Porras poco antes de las elecciones municipales, explicó el alcalde; tras ello, se abrieron diligencias de investigación en la Fiscalía, que ha acabado remitiendo el caso al juez decano, quien deberá turnarlo a uno de los 14 juzgados de Instrucción por diversos presuntos delitos, entre ellos prevaricación, siempre según la resolución de Fiscalía.
Esa reactivación no es más que el envío del expediente al Decanato, pero el alcalde aseguró: «Diez meses después, el fiscal mueve un papel en víspera de las elecciones autonómicas». «Yo digo que da la casualidad, usted interprételo como quiera», añadió.
El presidente de la Audiencia no quiso polemizar con el alcalde, de quien resaltó que «siempre ha sido muy respetuoso con la justicia». «No he escuchado sus declaraciones, pero me cuesta creer que exista intencionalidad política» en la remisión del expediente del caso Porras al Juzgado Decano para que sea turnado a un instructor. «Los procesos judiciales tienen su tiempo, no es el mismo tiempo de la política. Si el fiscal debe remitir la causa al juzgado, ha de hacerlo, no se pueden retrasar los casos hasta las elecciones», precisó Antonio Alcalá, quien declinó entrar al fondo del asunto.
El regidor malagueño volvió a insistir el pasado martes en que Porras, edil de Servicios Operativos, cuenta aún con todo su apoyo. «¿Por qué ha tardado el fiscal diez meses en mover el papel?», se preguntó.
