La temporada de precipitaciones ha sido especialmente escasa. La falta de agua condiciona a su vez la agricultura, seca el campo y la hojarasca es para las llamas como si de alcohol se tratara, un gran conductor que provoca y propicia que éstas se extiendan y que lo hagan además rápidamente. Si a estas circunstancias se suman las elevadas temperaturas que suelen registrarse en la provincia y se dan además rachas de viento, el cóctel obtenido puede resultar fatal para el campo, la naturaleza y la riqueza medioambiental malagueña.
La sequía que azota la provincia, si no se producen las últimas y esperanzadores lluvias primaverales, vaticina y augura una campaña de lucha contra los incendios forestales dura e intensa y de presumibles graves consecuencias si todos los agentes implicados, organismos y los propios ciudadanos no extreman las precauciones, explican fuentes del dispositivo Infoca, de la Delegación de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía y del Consorcio Provincial de Bomberos (CPB) de la Diputación de Málaga.
La negativa situación de partida ha obligado al Infoca a adelantar su campaña preventiva e informativa dirigida a las asociaciones agrarias, federaciones de cazas y resto de colectivos, en la que se les solicita que extremen las medidas de precaución, se les ofrece una serie de recomendaciones y se les recuerda la normativa, indica una portavoz del Infoca. Normalmente se inicia en mayo y en esta ocasión se ha adelantado, señala.
Además el dispositivo estudia adelantar el refuerzo del dispositivo de efectivos –el Infoca está todo el año en marcha, pero para la campaña de verano se incorporan todos los efectivos a la lucha activa contra incendios, mientras que el resto del año realizan otras labores de prevención, limpieza de montes, desbroce–.
Y es que la provincia de Málaga en el presente año de lluvias –desde septiembre a la actualidad– presenta ya un déficit del 40% de precipitaciones en relación a la media, indica la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). El año está siendo especialmente seco. La temporada comenzó bien hasta el pasado 2 de diciembre. A partir de esa fecha las lluvias han sido inapreciables y muy escasas, según revelan los datos de la Aemet y también del sistema SAIH de medición de las precipitaciones de la Junta. De hecho, desde el pasado día 18 de febrero hasta el 25 no ha caído ni una sola gota.
Las lluvias no llegan. Respecto a los datos del SAIH, que mide el año hidrológico desde octubre y no desde septiembre, cabe señalar que en esta temporada de lluvias Málaga estuvo sin precipitaciones 44 días, entre el 3 de diciembre y el 15 de enero, es decir, la quinta serie seca más larga de la historia reciente. La más larga se produjo en el mismo trimestre de 1980-81 cuando hubo 90 días seguidos sin llover, prácticamente todo el periodo.
La precipitación acumulada en octubre fue de 48,6 litros por metro cuadrado (cuando la media es de 52,2), y en noviembre de 161,7 litros frente a la media de 65,2. Pero es que en diciembre apenas cayeron 1,3 litros en la estación de Málaga frente a los 114,7 de media de años anteriores y, en enero, 10,3 litros en la estación Málaga y 18,3 en Guadalteba frente a los 62 y 52,9 de media de años anteriores.
En estos primeros meses del año hidrológico, de octubre a febrero, ha llovido la mitad que el año pasado por estas fechas en casi todas las estaciones de medición de lluvia de la red Hidrosur. A pesar de la escasez de lluvias, la Delegación de Medio Ambiente asegura que el abastecimiento está garantizado a la población durante los próximos dos años con las reservas existentes actualmente. El embalse de la Concepción es la cabecera de pantano donde más ha llovido, con un acumulado de 371 litros.
Nuevos efectivos materiales. La falta de lluvias, las elevadas temperaturas y el viento pueden ser fatales en un incendio, indica el gerente del Consorcio Provincial de Bomberos, Manuel Marmolejo. Sus efectivos apoyan «en todo momento» las acciones coordinadas por el Infoca. «Hemos dotado ahora al consorcio de cuatro camiones rurales, en Ronda, Coín, Vélez y Antequera», como refuerzo al dispositivo existente, lo que permitirá una intervención más eficaz, explica.
Además, el dispositivo ya está preparado. De hecho, en la época estival todos y cada uno de los bomberos están operativos y disponibles. El Consorcio realiza también por las urbanizaciones cercanas campañas de prevención y concienciación entre la población para que no enciendan barbacoas ni fuegos cercanos a montañas o en lugares en los que no se deba. Y es que una simple colilla mal apagada puede ser fatal.
La provincia se ha visto azotada en los últimos meses por el incendio de Pujerra que azotó cientos de hectáreas. Málaga ha perdido a causa de las llamas casi 43.000 hectáreas en los últimos 23 años y en un total de 3.212 siniestros, según los informes de la Junta.
En la evolución tanto el número de incendios como el de hectáreas calcinadas ha descendido, lo que se atribuye al mayor número de efectivos y de acciones preventivas y de campañas de concienciación. Mijas, Estepona y Cortes de la Frontera, han sido los municipios más afectados por incendios en el cuadro histórico.
