Los sindicatos mayoritarios, CCOO y UGT, han solicitado hoy un acuerdo laboral para la fusión entre Unicaja Banco y Banco Caja España-Duero (Banco Ceiss) tras aprobarse ayer el nuevo plan económico-financiero por sus respectivos consejos adaptado a las nuevas exigencias regulatorias.

Unos 9.400 empleos suman las entidades matrices de ambos bancos, un poco más de la mitad de la castellanoleonesa Caja España-Duero y el resto de Unicaja, con sede en Málaga, a los que se suman otro millar del grupo empresarial, y la unión forma el mayor tercer grupo de cajas con un negocio bancario de 120.000 millones de euros.

José Luis Cid, integrante del consejo de Unicaja Banco en representación de CCOO, ha asegurado hoy a Efe que "hay que reactivar y volver a ponerse las pilas con la mesa laboral, que no se reúne desde el 2 de febrero".

En este sentido, han expresado ya en una carta al presidente de Unicaja, Braulio Medel, el interés de su central en reactivar esa mesa, "y ahora más que nunca, conocido que se ha modificado el plan de negocio", al tiempo que sobre la fusión ve que "para hacerla viable habrá que sentarse cuando más pronto mejor".

"Lo más importante es la viabilidad de la empresa resultante y también los puestos de trabajo", ha destacado Cid, que plantea que "no haya despidos traumáticos" y aboga por sentarse y "ver el impacto de lo que hay sobre la mesa".

Añade que hasta ahora únicamente se puso en la mesa un borrador, pero cree que "falta mucho, y principalmente la adaptación al nuevo plan de negocio", que "hay que ser prudentes" y que "buena voluntad habrá que poner por todos y Comisiones Obreras está dispuesta, como siempre, a sentarse y negociar".

La próxima semana conversará con los responsables de Recursos Humanos de la entidad para consensuar una reunión de la mesa lo más rápido posible y ha precisado que aunque se incluyó en la negociación únicamente el personal de la matriz, supone que en el futuro habrá que tratar también de los empleados del grupo.

Por su parte, desde UGT se espera también la apertura de la mesa de negociación donde conseguir "ese acuerdo tan necesario para dar tranquilidad a todos, trabajadores y empresa".

El papel de los sindicatos es "negociar un buen acuerdo laboral para todos los trabajadores de la entidad resultante, esta vez con la dificultad añadida del nuevo escenario que nos ha impuesto el gobierno del PP con su reforma laboral y que tanto daño va a hacer a todos", según Rafael Martínez, de la sección sindical estatal de UGT en Unicaja.

Sostiene que la fusión "ofrece una situación de solvencia y garantía que refuerza la tranquilidad que ya Unicaja de por sí ofrece a clientes, trabajadores y a la sociedad en general" y que "no cabe duda que esta solvencia y garantía reafirma el mantenimiento del empleo, fin primero y principal de la UGT".

Ha resaltado en un comunicado que se ha dado "luz verde a una integración que había estado en peligro de no realizarse debido al cambio de las reglas de juego a mitad de la partida, impuestas por el gobierno y que hacia muy difícil conseguir unas garantías suficientes para la viabilidad del proyecto".

Señala que "gracias a la buena gestión y voluntad de llegar a acuerdos por parte de todos se ha conseguido que el riesgo que podía aparecer quede mitigado con una serie de garantías que los consejos de las dos cajas han estimado suficientes como para aprobar este proyecto".

Martínez mantiene que "con esta fusión se consigue una dimensión lo suficientemente importante como para poder competir en el mercado con el resto de entidades que también se están reforzando con sus correspondientes fusiones" y que "eliminamos el riesgo de quedarnos en el vagón de cola con respecto al tamaño de la empresa".