La Audiencia de Málaga tiene previsto juzgar desde este martes día 10 de abril a dos exmando de la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (Udyco) Costa del Sol de la Policía Nacional, Carlos F. y Alfredo M., para los que la Fiscalía Anticorrupción pide 19 y ocho años de prisión, respectivamente, al acusarles de cometer presuntas irregularidades en el ejercicio de su trabajo. Además, pide para ambos inhabilitación y cuatro años de suspensión.

El juicio comenzará en la Sección Novena este martes y está previsto que continúe los días 11, 16 y 18 de abril y otras 16 sesiones distribuidas en los meses sucesivos hasta julio. En esta causa, también se juzga a una tercera persona, que presuntamente mantuvo una relación de informadora con los anteriores. El ministerio fiscal solicita para este hombre una pena de cuatro años y siete meses de prisión. En su escrito de acusación inicial, el ministerio público acusa al que fuera jefe del Grupo de Crimen Organizado de Marbella (Málaga) Carlos F. como autor de delitos de malversación, falsedad, quebrantamiento de condena y detención ilegal. Para éste solicita, además de la pena de prisión y la suspensión, un total de 14 años de inhabilitación absoluta y 20 de especial. Al otro agente, Alfredo M., inspector jefe de la sección de Crimen Organizado, se le acusa de los delitos de omisión del deber de perseguir delitos, de quebrantamiento de condena, de malversación, cohecho y tenencia ilícita de armas, pidiendo, además de la pena de cárcel, 14 años de inhabilitación. Al tercer acusado se le acusa por quebrantamiento de condena y por malversación como cooperador necesario. Las investigaciones comenzaron en 2006 por Asuntos Internos, bajo supervisión del Juzgado de Instrucción número 5 marbellí. La acusación relata la actuación de los agentes en intervenciones policiales, como la llamada operación Topo, en la que funcionarios del grupo, al mando del acusado Carlos F., desarticularon un grupo de narcotraficantes en Marbella, siendo, presuntamente, el cabecilla Sophian H., acusado en Ballena Blanca.

Tras ofrecer resistencia, Sophian H. fue arrestado en ese operativo de mayo de 2004, en el que resultó herido un agente que momentos antes había cogido un reloj de oro que había perdido el detenido en el forcejeo, según el ministerio fiscal. El objeto fue depositado en Comisaría a disposición del inspector Carlos F., quien lo recibió como instructor «sin emitir recibo» y que «advirtió de que era un valioso reloj de oro», con un valor entonces de 20.000 euros.

Según el fiscal, el procesado, «cediendo ante un sentimiento de codicia, decidió que intentaría adueñárselo» y omitió «adrede» hacer referencia al mismo en los escritos, aunque el abogado del detenido lo reclamó. A pesar de que el inspector «dio largas, negando su existencia», ante la insistencia, optó por devolverlo y aportó otro informe «de contenido falaz» y «simulando» haber ordenado la búsqueda en las dependencias por lo que se había encontrado el reloj.