Las claves para la financiación del deporte local en los tiempos actuales pasan por rentabilizar los recursos existentes, mancomunar los servicios locales y favorecer patrocinios bajo la figura del consorcio, implicar al sector privado y no entrar en competencias que no son propias.
Estas son las nuevas fórmulas que expuso el presidente de la Diputación, Elías Bendodo, en la conferencia que impartió ayer en el marco del X Congreso de la Asociación Andaluza de Gestores Deportivos (Agesport), entidad presidida por Salvador Jiménez, que se celebró en el Auditorio de la Diputación y en el que participaron cerca de 350 expertos. Bendodo explicó que se debe plantear un modelo que equilibre la demanda y rentabilice las ofertas. Para ello insistió en la necesidad de que «cada administración preste los servicios que les competan y que propicie la inversión para mantener y evitar el deterioro de las instalaciones», a través de la cofinanciación y la externalización de servicios, incluso con la delegación de competencias al sector privado, como las federaciones deportivas.
Además, el presidente ha señalado como la más adecuada la opción de mancomunar servicios e infraestructuras para rentabilizar los recursos y aligerar los costes de mantenimiento de espacios y técnicos deportivos, impulsando la incorporación de profesionales autónomos del deporte.
En el marco de la crisis económica actual, Bendodo ha insistido en que "hay que encontrar equilibrios entre el sector público y el privado y apostar por una práctica deportiva que sea rentable socialmente y que esté acompañada por una financiación independiente y estable".
Por ello ha subrayado que se deben "evitar los excesos en la construcción de grandes infraestructuras y en la organización de eventos y espectáculos deportivos de elite que no resulten atractivos ni para la inversión, ni para la sociedad ni para el deporte".
No obstante, ha subrayado que el sector deportivo posee cualidades que le permitirá encontrar oportunidades en esta situación económica. De hecho, Bendodo ha destacado en primer lugar la concepción positiva tanto social como científica del ejercicio físico y del deporte para la educación, la salud y el desarrollo personal.
Asimismo, ha añadido que existe un valor añadido por la alta calidad de la formación de técnicos y gestores deportivos, por el avance de las tecnologías aplicadas a este sector y por el hecho de que existe una dotación "importante de infraestructuras públicas que, ahora más que nunca, requiere obtener rentabilidad.
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