Un viejo conocido de la policía española y malagueña ha caído. Se trata de Ian Donaldson, un escocés de 32 años acusado de financiar a una banda presuntamente dedicada al narcotráfico de cocaína entre España y Escocia. Según publican estos días los medios de su país natal, Donaldson fue localizado hace unos días por los efectivos de la Agencia de Medicamentos en el desván de una granja escocesa con una bolsa que contenía cerca de 70.000 libras.

Esta cantidad no sorprendió a los investigadores, ya que el detenido lleva mucho tiempo en el punto de mira de la policía bajo la sospecha de amasar grandes cantidades de dinero supuestamente procedentes del mundo del narcotráfico. Al parecer, este expiloto aficionado amante de los deportivos de lujo nunca se esforzó por ocultar un alto nivel de vida, fundamentalmente en Marbella y Tenerife. Los medios escoceses aseguran que, tras la detención de hace unos días, Donaldson declaró desde Edimburgo la Audiencia Nacional vía conferencia, tras lo que fue puesto en libertad bajo fianza.

No es la primera detención que sufre este escocés. En 2009, fue arrestado al verse salpicado en la sonada operación Sendero desarrollada por la Policía Nacional. La primera fase de aquella investigación se puso en marcha cuando los agentes desarticularon una organización

internacional dedicada a la distribución de esta droga e incautaron un transporte de 70 kilogramos de sulfato de anfetamina en Oxford.

Con la ayuda de las autoridades británicas, las pesquisas revelaron que la red criminal enviaba los grandes beneficios conseguidos por medio de su actividad ilícita hacia el sector inmobiliario y a la compra de vehículos de lujo y deportivos de alto nivel mediante un entramado de sociedades. La policía intervino, entre otras cosas, un Ferrari F430, un 599 Fiorano, dos Hummer, un Porsche Cayenne, un Audi Q7, un BMW 645 y un 335, y un Mercedes 63 AMG.