La Diputación de Málaga presidida por el popular Elías Bendodo aprobó ayer de forma inicial en el pleno ordinario del mes de mayo un nuevo reglamento orgánico que dota a la institución de «mayor participación y transparencia», mejora su fiscalización y, por tanto, la convierte en «más democrática». La Diputación ha incluido la llamada «Tribuna de Alcaldes», pactada con el grupo del PSOE, para dar voz a los regidores y a representantes de colectivos sociales de la provincia, y que en cada sesión plenaria podrán plantear iniciativas, debates, dudas o peticiones de forma libre ante los tres grupos políticos representados en la cámara.

El nuevo reglamento prevé un máximo de tres comparecencias en cada pleno, indistintamente de si se trata de alcaldes o de representantes ciudadanos. Las asociaciones que quieran intervenir deberán estar inscritas en el Registro Provincial de Colectivos de Ámbito Provincial de Málaga que se creará al efecto.

La aprobación del texto contó, sin embargo, con el rechazo de IU, por considerar que «amordaza» la pluralidad política y a «la tercera fuerza más votada en la provincia, en Andalucía y en España», según manifestó la portavoz de la coalición, María Antonia Morillas, en la comparecencia previa al pleno. Morillas lamentó que a partir de ahora IU solo podrá presentar una única moción, ya que el nuevo reglamento limita a 12 el número de mociones que se podrán tratar –más otras tres por vía urgente–, distribuyéndose de forma proporcional a la representatividad de cada grupo en la Corporación.

Además, IU criticó que las intervenciones de alcaldes y colectivos serán determinadas «sin criterio objetivo» en las comisiones. El portavoz del PSOE, Francisco Conejo, por su parte, defendió la «flexibilidad» mostrada por el equipo de gobierno del PP a la hora de admitir propuestas.

«Hemos hecho un buen trabajo», consideró Conejo, que apuntó que el consenso con IU no ha sido posible porque «no entendía el criterio a la hora de repartir las mociones a pleno».

Por otro lado, el equipo de gobierno del PP rechazó en el pleno celebrado ayer lo que para los socialistas constituye «el asunto más importante a tratar en esta legislatura», la referente a la eliminación o agrupación no voluntaria de municipios menores de 5.000 habitantes.

Según Conejo, esta medida supondría la desaparición de 73 de los 101 municipios malagueños, por lo que pidió que se defienda su mantenimiento y que Diputación, junto a esos 73 alcaldes, se reúna con el Gobierno para dar «marcha atrás» a la medida. Los populares, por su parte, sostienen que la valoración del PSOE se basa únicamente en «presunciones».