Aún no se ha aprobado la planificación del servicio, pero los sindicatos sanitarios desconfían de la situación. Los recortes propuestos por la Junta les han puesto en sobreaviso y su perspectiva no es precisamente optimista; consideran que las nuevas condiciones €que afectan directamente al personal interino€ entorpecerán todavía más la contratación del profesionales de reemplazo para afrontar las vacaciones, lo que, a la postre, insisten, incidirá en la calidad del sistema de salud.

Cuando se les pregunta por los próximos tres meses, lo sindicatos coinciden en expresar su preocupación y pronostican un verano«caótico», en el que, de momento, señalan, se desconoce las estrategias que empleará la administración para compensar las bajas, especialmente tras los últimos cambios en la legislación. «No podemos prever lo que pasará el 1 de junio, pero está claro que no pinta muy bien», advierte Fermín Parrondo, presidente del Sindicato Médico de Málaga.

Las expectativas, en cualquier caso, no invitan a la euforia. Los profesionales están convencidos de que los recortes alterarán el funcionamiento de la sanidad de manera inmediata, con un verano en el que, presumen, los centros de salud y de especialidades permanecerán cerrados por la tarde y en el que los quirófanos reducirán considerablemente sus operaciones. «Si otros años ya funcionaban al 50 por ciento, ahora tenga por seguro que sólo se atenderán las urgencias», declara Eugenio Pérez, sindicato del Satse.

La caída del personal de sustitución y el recorte de las horas de trabajo de los interinos provocará, señalan los sindicatos, que aumenten las listas de espera y se suprima temporalmente la actividad en muchas áreas de los centros hospitalario; al caso del Clínico, que mantiene inutilizada una de las plantas construidas para aliviar la presión de los ingresos, se sumará en los próximos días, según CCOO, otra más en Ronda. Los cálculos, en lo que respecta al verano, son aún más agresivos. De acuerdo con Eugenio Pérez, la falta de personal podría suponer el cierre de la mitad de las plantas de la provincia. «Esto comportaría más masificación y sobrecarga, con una ratio más elevada de pacientes por habitación y peor servicio», indica Rafael González, responsable provincial del sector en CCOO.

La última oleada de recortes parece haber consumido la paciencia de los profesionales, que dibujan un panorama de sanitarios insuficientes y, además, desanimados. «Si esto continúa va a llegar el punto en el que los médicos dejemos de colaborar con la burocracia y mantengamos el compromiso sólo con el paciente», resalta.

La rebaja en el salario de los sanitarios coincide con la eliminación de complementos como la continuidad asistencial, que gratificaba los servicios vespertinos a algunos colectivos sanitarios. Eugenio Pérez teme que los reajustes veraniegos sean sólo el comienzo de una nueva política sanitaria gobernada por las restricciones. «Al final parece que quieren que tengamos una sanidad de primera y una de segunda. Los recortes debían haber mirado a subvenciones y programas menos necesarios», indica. En unos términos parecidos se pronuncia Parrondo, que se queja de la carga reiterada sobre los médicos. «Ya nos bajaron el salario un 11% en 2010. La administración nos pone de ejemplo y luego nos maltrata», precisa.

Juan Miguel Contioso, responsable de Sanidad en UGT, teme también el cierre temporal de plantas y servicios durante este verano. Además, se muestra preocupado por la aplicación del programa de recortes. «Puede ser caótico cuando cada unidad de gestión clínica formule el descuento de horas a su modo», indica. González da un mensaje poco alentador: «Lo que está claro es que la sanidad va a ser peor de lo que era hace unos meses», puntualiza.

Nuevas protestas contra los recortes

Las últimas medidas adoptadas por la Junta de Andalucía para ayudar a corregir el déficit han endurecido las protestas de los colectivos sanitarios, que presumen un verano repleto de movilizaciones. Por lo pronto, los sanitarios ya han comenzado con un calendario de paros diarios de diez minutos, al que proseguirá una movilización el próximo 29 de junio. En esa fecha, está previsto que profesionales de todos los estamentos se congreguen en el Carlos Haya para mostrar su repulsa a los recortes. «Será algo histórico. Calculamos que más de un millar de trabajadores participará en la movilización», declara Eugenio Pérez, responsable provincial del Satse.

Previamente a esta última concentración, el día 12 junio, se ha programado a nivel nacional una concentración frente a las puertas del Ministerio de Educación. Alrededor de 350 sanitarios de Málaga formarán parte de la expedición, que pretende reunir a 15.000 personas junto al edificio del departamento liderado por Ana Mato. Los sindicatos están preocupados por la posibilidad de que las nuevas medidas deterioren la calidad del sistema público, que tiene un reto inmediato, la configuración de los turnos de verano. «Pensamos que puede ser peor, incluso, que en 2008, cuando tuvimos que manifestarnos en la Alameda para lograr que aumentarán las sustituciones», señalan. Los recortes comportan una reducción del horario del personal interino, así como descuentos en los salarios de los profesionales.