El nerviosismo del conductor de un vehículo interceptado por la Guardia Civil en la A-92 por una infracción de tráfico hizo sospechar a los agentes, que finalmente encontraron en el respaldo del asiento del copiloto, ocultas bajo la tapicería, dos bolsas que contenían 567 gramos de cocaína.

El conductor fue identificado por los agentes de Antequera en el kilómetro 5 de la mencionada carretera. Debido a su actitud, llevaron a cabo una primera inspección del vehículo, en la que localizaron 2.220 euros en efectivo y una bolsa que contenía sustancias anabolizantes, según informaron ayer fuentes del instituto armado a través de un comunicado de prensa.

Ante el nerviosismo del conductor, se hizo un examen exhaustivo del vehículo en el que intervino el perro detector de narcóticos, que marcó el respaldo del asiento del copiloto como lugar de ocultación de sustancias estupefacientes.