No tiene nada que ver con Bankia, ni va a ser rescatado por el Banco Central Europeo. Sus datos de solvencia están fuera de toda duda y aporta muchos beneficios a la sociedad. El Banco del Tiempo ha cumplido ya tres años de actividad en Málaga y se va extendiendo poco a poco por todos los distritos. No obstante, es el Centro donde está la principal sucursal de este peculiar banco, ya que fue la primera en ponerse en marcha gracias a las asociaciones Arrabal y Ágora.

Su balance es muy positivo desde que iniciara su actividad en 2009, con casi 3.000 intercambios de tiempo realizados desde su creación y su consolidación como una red de ayuda y compañía a muchos vecinos del Centro. Actualmente, de las 517 personas apuntadas a esta iniciativa, 312 están en el distrito Centro y el resto (205) se distribuyen entre los otros cuatro distritos incluidos hasta el momento.

El dinamismo de esta iniciativa se ha mantenido sin mácula desde 2009. Lleva acumuladas más de 5.800 horas de servicio gratuito prestadas entre los vecinos inscritos en el Banco del Tiempo, que funciona con un sistema muy sencillo de intercambio de horas. Una persona se inscribe en el banco de forma gratuita y ofrece un servicio, como puede ser alguna pequeña labor de bricolaje, compañía, la enseñanza de un idioma o instrumento, consejos... Las horas destinadas a prestar este servicio de forma gratuita al resto de inscritos se devuelve en forma de un talonario con horas disponibles y que puede pedir para que otras personas le ayuden con alguna necesidad.

«Es habitual que la gente aporte más horas de las que reclama, pero el sentido del Banco del Tiempo también es educar para recibir ayuda», explicó el concejal de Derechos Sociales, Francisco Pomares, quien apuntó que son más mujeres las inscritas en este servicio que hombres, en una proporción de tres a uno. «Esto demuestra que la mujer se organiza mejor el tiempo y aprecia mejor el intercambio del tiempo, porque supera antes la vergüenza», afirma Pomares.

Actualmente hay bancos del tiempo en Bailén, Churriana, Carretera de Cádiz y Distrito Este, aunque a lo largo de este año se extenderá al Puerto de la Torre y Teatinos, con idea de continuar su expansión a lo largo de 2013.

Mari Nieves Gómez, la presidenta de la asociación de mujeres Agora, explicó que el Banco del Tiempo es una forma de rentabilizar recursos, pero que no se aprecia un incremento de su uso por la crisis «ni se quita trabajo». «Lo que más se pide son actividades relacionadas con el ocio, el cuidado del cuerpo y la salud», señala Mari Nieves Gómez.

La presidenta de Ágora recalcó que uno de los principales beneficios del Banco del Tiempo es la creación de redes de colaboración entre vecinos de una misma zona. «Mucho de lo que nos piden es acompañamiento», advierte, ya que han detectado que hay un alto porcentaje de aislamiento entre los vecinos del Centro. Además, se facilita la integración de familias de inmigrantes, que enseñan su cultura y conocen a gente de su entorno.