Clínicas Rincón pondrá en marcha desde el 11 al 15 de junio una campaña de concienciación ante la osteoporosis. En este marco ofrecerá densitometrías óseas gratuitas a aquellas mujeres que soliciten una cita. Esta prueba, sencilla, fácil e indolora, es la necesaria para detectar osteoporosis. Un tratamiento a tiempo y eficaz es vital para mantener la calidad de vida de las mujeres en un futuro y evitar fracturas.

¿Cuál es el problema de no tratar la osteoporosis?

Con una simple densitometría podemos actuar sobre la destrucción ósea precozmente y evitar así posteriores fracturas de huesos. A una mujer de 70 años con problemas de artrosis, artritis, le sumas una fractura del cuello del fémur o de la columna y la condenas a tenerla semiinválida, en una silla o unas muletas. De ahí la importancia de detectar precozmente que se está produciendo osteoporosis y evitar la fractura que a su vez va a suponer un daño mayor.

¿A qué edad afecta la osteoporosis y por qué?

Normalmente la osteoporosis aparece después de la menopausia, porque hay una serie de procesos y de cambios en la mujer que hacen que haya una pérdida de la masa ósea, el hueso queda como con boquetitos como si fuera un queso gruyere y el problema no es el dolor, sino la fractura.

¿Por qué afecta la menopausia a los huesos?

Los cambios hormonales influyen en el metabolismo óseo, los ovarios dejan de funcionar, no se producen las hormonas femeninas y ese desequilibrio hormonal actúa sobre los mecanismos de conservación del hueso.

¿Cuáles son los tratamientos?

Lo que intentamos con los tratamientos es que no vaya produciéndose esa descalcificación si no que por lo menos se detenga. Volver al estado natural no es posible, siempre hay un deterioro, pero por lo menos que no vaya en progresión.

¿Hay el mismo número de mujeres afectadas hoy por osteoporosis que hace unos años o por contra va en aumento o en disminución?

La osteoporosis se da igual ahora que hace 20 años, quizás ahora la mujer se cuida más. Antes se decía se cayó la abuela y se rompió un hueso, pero no, es se rompió un hueso y se cayó la abuela. Hoy día con estas técnicas de las densitometrías y las campañas de concienciación la gente se cuida más, se hacen más densitometrías y se detecta precozmente.

¿A qué edad debe hacerse una mujer la primera densitometría?

Pasados tres, cuatro o cinco años de la menopausia. Si la menopausia ahora está en los 48 o los 50 años pues a partir de los 53-55 años es conveniente hacerse esta prueba porque es cómoda, no es dolorosa y no es costosa. Es como una radiografía y te puedes quedar con la tranquilidad de que el hueso lo vas controlando. A los 55 años empezarán las primeras descalcificaciones, pero cuando más se encuentran es a partir de los 60. Cuanto antes se detecte antes se pondrán los medios y podremos evitar esa progresión. Otra historia es la osteoporosis quirúrgica, es decir, mujeres que con 40 años se les quitan los ovarios porque tengan un tumor y entran en una menopausia precoz y empieza a ponerse en marcha el proceso de destrucción del hueso. En estas mujeres con menopausia precoz deben hacerse a partir de los 45, es decir, diez años antes.

¿En qué consiste la campaña que van a poner en marcha?

Esta campaña es de prevención de la osteoporosis. Las personas pueden llamar al 952 399 974 y solicitar su cita. Le realizaremos la densitometría de forma totalmente gratuita. Conforme a los resultados, si se observa que es necesario la paciente llegará a mí y le informaré de su diagnóstico y del tratamiento.

¿Qué recomendaciones puede seguir una mujer para evitar la osteoporosis?

Al margen del tratamiento médico siempre se recomienda llevar una vida sana, andar, correr, y una alimentación con calcio, con leche, con queso, etc. Pero esto sólo sin el apoyo y la ayuda de los tratamientos que existen hoy en día no hace milagros. Con una combinación de todo esto esa mujer llegará a l final de su vida con una masa ósea en buenas condiciones.

Entonces, ¿son eficaces los tratamientos?

Efectivamente son eficaces pero hay que dejar bien claro que la masa ósea perdida no se recupera. El hueso tiene unas células que destruyen y otras que forman, y hay un equilibrio entre la formación y la destrucción. Cuando llega la menopausia hay más destrucción que formación. Nosotros con el tratamiento buscamos ese equilibrio.