La Audiencia Provincial ha rechazado el recurso interpuesto por los afectados en el caso de la huelga de los controladores aéreos contra un auto del juez que investigaba el asunto y rechaza obligar al togado a que pida todos los procesos abiertos por este tema en el país para demostrar que se coordinaron para no ir a trabajar.

De paso, la Sala también rechaza en su auto, fechado el 4 de mayo de 2012, la imputación de tres altos cargos del sindicato que representa a estos profesionales, que se dieron de baja los días 3 y 4 de diciembre de 2010 provocando el cierre del espacio aéreo.

Los afectados pidieron que el titular del Juzgado de Instrucción número 6 de Málaga exigiera a doce instancias judiciales del país todas las causas abiertas por estos hechos para que tuviera una visión global. Pero la Sala entiende: «En el presente caso no se especifica qué tipo de informes o diligencias de prueba concretas practicadas en otro orden judicial pueden tener relevancia en los delitos investigados», al tiempo que afirma que no han argumentado por qué esas causas y las pruebas practicadas en su seno podrían serle o no favorables a sus tesis.

«La diligencia pedida es impertinente e innecesaria», por lo que la Audiencia confirma la denegación de pruebas que en su día acordó el instructor.

Los fundamentos jurídicos del auto de primera instancia son «acertados y fueron correctamente formulados». «No debe producirse una admisión indiscriminada de los medios de prueba», precisa la Audiencia, para añadir que la petición de los afectados «es genérica».

La Sala asegura que el juez ya tuvo una visión global de los hechos, conclusión a la que llegó simplemente leyendo el decreto de incoación de las diligencias de investigación de la Fiscalía. «Sí fue intencionado, coordinador y organizado el paro», aseguró el letrado de los afectados en el recurso.

La Audiencia Nacional rechazó en su día una investigación global como la que piden los afectados de Málaga, que finalmente no han conseguido que el juez local acceda a efectuar una investigación ambiciosa y compleja. Los controladores malagueños entregaron en su día diversos partes médicos con los que se justificaban por su ausencia que fueron validados por los médicos forenses.