Sin las nuevas tecnologías, no hay futuro para el turismo. Todos los agentes implicados en el sector están convencidos de que para mantener la competitividad hay que caminar de la mano de la innovación e internet, aunque para algunos sectores, como el de las agencias de viajes, la irrupción de las nuevas tecnologías haya traído consecuencias negativas. «Las agencias receptoras sobreviven, pero las emisoras están en estado crítico, porque salvo para reservar un gran viaje, la mayoría usa internet», reconoce el vicepresidente de Aedav, Joaquín Fernández Gamboa.

El consejero de Turismo, Rafael Rodríguez, incide, por su parte, en el papel que pueden y deben jugar las nuevas tecnologías y su aplicación al marketing turístico, resaltando la importancia de herramientas puestas en marcha por la consejería como la comunidad turística o el Andalucía Lab. También el presidente de Aehcos, José Carlos Escribano, habla de «seguir apostando por las nuevas tecnologías», al tiempo que se lucha por la calidad, la especialización y la segmentación. «La generación que viene no se mueve sin mirar internet», dice, por su parte, Francisco Cabrera.

El presidente de la Diputación y del Patronato , Elías Bendodo, deja claro que no contar con internet puede alejar incluso a turistas, si no encuentran la forma de reservar por la Red alguna de sus actividades. Y pone como ejemplo el golf. «El turista que quiere venir puede reservar previamente dónde alojarse, dónde comer o cenar, pero no puede hacer una reserva para jugar», explica. Para avanzar en ese camino, precisamente, el Patronato está trabajando en una plataforma que permita a los potenciales visitantes reservar con antelación los green fees. A ese proyecto ya se han unido 26 de los 50 campos de la Costa.