La Guardia Civil de Málaga ha desmantelado dos tramas dedicadas a la gestión de residuos de aceite vegetal usado a través de las operaciones «Logo» y «Oleum» que se suman a la operación «Forge» llevada a cabo a principios de junio. Con éstas son ya seis las operaciones realizadas por delitos de gestión de recogida de aceite vegetal usado, un negocio que, según la Guardia Civil, está «en expansión», y cuya demanda «aumenta en gran medida en la época estival debido al incremento del trabajo en hostelería y restauración, dando lugar a un incremento de estafas e irregularidades en la recogida de residuos aceite vegetal usado».

Las dos últimas operaciones se han saldado con la imputación de seis personas que se dedicaban a la recogida de aceite vegetal usado, dos de ellas mediante la creación de una falsa empresa –operación «Logo»– y los otros cuatro haciéndose pasar por empleados de una empresa legalizada y autorizada –operación «Oleum»–.

La primera de las operaciones comenzó tras la denuncia por parte de una empresa, que se dedicaba a la recogida de aceites y grasas, a otra del mismo sector, que finalmente resultó ser una empresa falsa. Esta trama estaba formada por dos individuos, que habían creado una empresa ficticia, utilizando para ello todo tipo de documentación falsa, donde incluían logos de la Junta de Andalucía y del Gobierno de España, para dar autenticidad a la empresa, y recogían el aceite que estaba envasado en garrafas propiedad de otras empresas.

Estos dos individuos han sido imputados por delitos de estafa y falsedad documental, hurto y contra la propiedad intelectual.

La trama descubierta por la operación «Oleum» se inició a raíz de la denuncia interpuesta por varios gestores de residuos de la provincia de Málaga, contra una empresa por supuestas irregularidades en la gestión de residuos de aceite vegetal usado.

En este caso, la trama consistía en que trabajadores de una empresa autorizada y legalizada de recogida de aceites de otra provincia se hacían pasar por empleados de empresas autorizadas en la provincia de Málaga y recogían el aceite en garrafas que pertenecían a la firma que decían representar.

Para dar autenticidad facilitaban a los clientes justificantes de recogida de residuos, en los que aparecía un número de gestor autorizado por la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía.

Sin embargo, según informa la Guardia Civil, esta circunstancia es completamente falsa, ya que, si existe este número de gestor, ha sido autorizado por las autoridades municipales de una determinada provincia, y sólo autoriza la gestión de este tipo de residuos en ese lugar.

Por tales hechos, han sido imputadas cuatro personas como presuntas autoras de los delitos de hurto, estafa y falsedad documental.