El presunto cerebro de la mayor trama de corrupción conocida en España, el caso Malaya, Juan Antonio Roca, ha pedido hoy al tribunal y a las acusaciones que reflexionen sobre por qué a asesinos como Santiago del Valle, condenado por la muerte de Mari Luz, se les pide menos años de prisión que a él.

En el trámite de su última palabra, Roca ha asegurado que en junio de 2010, Santiago del Valle, le preguntó mientras cenaba en la cárcel qué delito había cometido para que le pidieran más pena de cárcel que a él y "la verdad no supe qué contestarle", ha agregado el acusado. También ha recordado a otro recluso condenado por asesinar, descuartizar y meter en una maleta a su mujer que ya disfruta de un permiso de tercer grado.

Además, Juan Antonio Roca ha lamentado "profundamente el daño que se ha causado a Marbella y a los ciudadanos con motivo de esta causa" y ha pedido una reflexión a la Sala sobre su situación penitenciaria, incidiendo en que "estoy pasando mi séptimo verano en prisión" y si el Tribunal acepta la petición del ministerio fiscal, de 30 años de cárcel, "sería pasar el resto de mi vida en prisión".

Roca ha asegurado que "el nombre de Marbella se ha visto asociado en los últimos años inexorable y negativamente a esta causa" y ha apuntado que "se ha pretendido reescribir mi pasado de una forma un tanto parcial, incluso mi pasado muchos años antes de vincularme al Ayuntamiento de Marbella".

Ha pedido perdón a la Sala por ser "más vehemente de lo que debía haber sido" en su interrogatorio y ha lamentado la situación del resto de imputados, tanto de su familia, como de "los que ni siquiera conocía antes de llegar aquí y se les acusa de estar relacionados conmigo", así como de los "excelentes profesionales que contraté y se han visto involucrados", de los empresarios con los que se relacionó y "de mis amigos, algunos han estado aquí exclusivamente por ser mis amigos".

Respecto a su situación penitenciaria, ha recordado que el día en el que se dio a conocer el escrito de acusación un recluso con el que compartía mesa le preguntó qué delito había cometido para pedirle más años de prisión que a él y no supo qué contestarle. "El recluso que me hizo esa pregunta fue Santiago del Valle, que varios meses después fue condenado a 22 años de prisión por el asesinato de Mariluz Cortés", ha apostillado.

Ha agradecido a la Sala en general, y en concreto al presidente, José Godino, las facilidades dadas y el trato "tan exquisito" recibido. También ha dado las gracias a la secretaria judicial y a los funcionarios porque "he podido ver y experimentar el lado más humano de la justicia".