La Junta de Andalucía al fin tiene en Málaga nueva estructura y nombres que la dirijan. El secretario provincial del PSOE, Miguel Ángel Heredia, ha situado a cargos afines al aparato del partido al frente de estas delegaciones. El hombre fuerte de la Junta en Málaga será José Luis Ruiz Espejo, nuevo delegado del Gobierno y una de las personas de confianza del líder socialista y actual diputado de la Diputación provincial. Así fue aprobado ayer en el consejo de gobierno de la Junta.

El Ejecutivo formado por PSOE e IU adelgaza su estructura y contará con cinco delegados provinciales, aglutinándose áreas y responsabilidades. Marta Rueda será la delegada territorial de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo; Daniel Pérez, de Salud y Bienestar Social; Javier Carnero de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente; Patricia Alba Luque, de Educación, Cultura y Deporte. A los cuatro delegados territoriales socialistas se une Manuel García Peláez, de IU, que estará al frente de Fomento, Vivienda, Turismo y Comercio.

Además, se creará una oficina territorial de la Vicepresidencia de la Junta –que ostenta Diego Valderas (IU)– en cada provincia, lo que supondrá el nombramiento de al menos una persona más. Finalmente ante las críticas no se ha aprobado la creación de diez coordinadores provinciales, hecho que hubiese supuesto el aumento de la estructura de la administración regional y no su adelgazamiento como se anunció.

Los nuevos nombramientos traen consigo cambios. José Luis Ruiz Espejo, Javier Carnero y Patricia Alba dejarán la Diputación provincial y a su vez serán sustituidos por la alcaldesa de Teba, Isabel Garnica; el portavoz socialista en Fuengirola, Javier García León y el portavoz del PSOE en Torremolinos, José Ortiz.

El secretario general del PSOE malagueño, Miguel Ángel Heredia, declaró ayer que el nuevo equipo es un grupo preparado para desarrollar en Málaga «el proyecto de alternativa andaluz que lidera Pepe Griñán». «Es un grupo renovado, capacitado, con estudios superiores, con experiencia de gestión y con mucho trabajo de calle en contacto con ciudadanos y ciudadanas en su etapa municipal»destacó.

De esta forma, el Consejo de Gobierno aprobó ayer el decreto regulador de la nueva Administración periférica de la Junta de Andalucía. Los objetivos son «reducir el déficit y mejorar la eficiencia de los recursos públicos y supondrá una disminución del 50% en el número de altos cargos en las provincias respecto a la anterior legislatura, al pasar de 97 a 49, así como un ahorro económico anual de alrededor de 2,7 millones de euros», indicó ayer la consejera de la Presidencia e Igualdad, Susana Díaz.

Según detalló la titular de la Presidencia, los únicos puestos ocupados por altos cargos en la nueva estructura provincial son los nueve delegados del Gobierno –uno por provincia y un noveno en el Campo de Gibraltar– y los 40 delegados territoriales, ya que el resto de puestos de la estructura periférica serán ocupados por funcionarios de carrera del grupo A. Es el caso de la nueva figura creada de las Secretarías Generales.