La Fiscalía de Málaga pide cinco años de prisión para un vecino de la capital al que acusa de un presunto delito de tenencia y distribución de pornografía infantil cometido al compartir, junto a otros 21 usuarios de internet de toda España, un vídeo con escenas de fuerte calado sexual en la que la protagonista es una niña de nueve años.

Según consta en la calificación fiscal, un vecino de Córdoba se bajó de internet un archivo con el fin de obtener un software de escáner, sin embargo éste no era tal, sino que contenía imágenes especialmente degradantes en las que se podía ver el abuso de una niña de nueve años.

A estas imágenes la policía les aplicó la función Hash, explica el ministerio público en su escrito, tras lo que se concluyó que, «desde el 15 de septiembre de 2008 hasta el 7 de octubre del mismo año, durante diez minutos, y en diversas horas, desde una determinada IP» -número que se asigna al usuario de la red-, el acusado se hacía llamar «sumiso malaga con alma».

Compartió el vídeo. Así, añade el representante de la acusación pública, el acusado, junto a otras 21 personas de toda España, compartió presuntamente ese vídeo. Todo ello, explica el fiscal, «guiado por el ánimo libidinoso, y empleando el programa de intercambio de archivos informáticos P2P Emule». Gracias a eso, «tenía a disposición de los usuarios» esas imágenes, compartiéndolas.

Tras las pesquisas preliminares, la Policía Nacional pidió al juzgado la correspondiente autorización judicial para investigar la IP, proporcionada por una empresa de telecomunicaciones. La misma remitía al domicilio de su padre, ubicado en una calle de la capital de la Costa del Sol, señala el responsable de la Fiscalía en este proceso.

Para más inri, la familia, añade, «no conocía a qué se dedicaba el acusado con los ordenadores». Tras reunir toda esta información, los investigadores solicitaron al Juzgado de Instrucción número 7 de Málaga que autorizara la orden de entrada y registro del domicilio en cuestión, lo que se produjo a las 10.30 horas de la mañana del 25 de marzo de 2009, indica el acusador público en el escrito, al que tuvo acceso La Opinión de Málaga.

Una vez dentro, los agentes del grupo de Delitos Tecnológicos de la policía comprobaron «que los ordenadores usados por el acusado tenían conexión a internet y el programa de intercambio de archivos P2P Emule». Asimismo, «se encontraron archivos de pornografía infantil, tanto en formato de vídeo como de imágenes».

Calificación fiscal. Los hechos han sido calificados por la Fiscalía Provincial como un presunto delito de tenencia y distribución de material pornográfico del artículo 189 del Código Penal, y pide por lo supuestamente sucedido cinco años de cárcel, las costas y la inhabilitación especial para el derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de la condena. Además, reclama la acusación particular el comiso de todo el material informático intervenido por los agentes. El juicio se celebrará el próximo martes, 18 de septiembre, en la Sección Primera de la Audiencia Provincial.