En Primaria e Infantil la Junta aguantó el envite. Pero en Secundaria y Bachillerato, en los institutos, los efectos del ya famoso real decreto 14/2012 se han dejado sentir algo más. Sobre todo para los profesores, porque habrán de dar dos horas más de clase a la semana, de 18 a 20; y porque muchos de ellos no cuentan este año para la Administración debido a ese aumento de sesiones lectivas, lo que se resume en una sangría laboral para los interinos, sobre todo. Según una encuesta efectuada por La Opinión de Málaga en 24 centros de la provincia, cada uno de ellos pierde entre dos y doce docentes, según los casos. La ratio de alumnos por clase ha subido ligeramente aun cuando la Consejería de Educación no ha aplicado ese mandato del Gobierno central. La tijera, concluyen los sindicatos, se está cebando con los institutos.

Los casos son dispares por las particularidades de cada centro (población, porcentaje de alumnado inmigrante, reducido por la crisis, cercanía de otros institutos, etcétera...), pero los datos no dejan lugar a dudas: algunas escuelas de enseñanza media pierden dos profesores en relación al pasado año académico, como el instituto La Maroma de Benamocarra, y otros como el Mare Nostrum de la capital prevén contar este curso con entre diez y doce docentes menos. En Marbella, Río Verde pierde diez profesores y nueve Guadalpín; Sierra de Mijas se queda con diez menos, mientras que Romero Esteo y Puerto de la Torre (Málaga) se ven obligados a prescindir de seis profesionales.

En otros casos, la plantilla no disminuye pero crece el número de alumnos, como sucede en el instituto Los Pacos de Fuengirola (tienen 21 docentes pero un curso más), o en el Salvador Rueda de la capital, que continúa con 63 profesores, igual que en el curso 2011/2012, pero con 100 horas más de clase.

En concreto, la media es de 5,70 profesores en los 24 institutos encuestados, pero en toda la provincia hay 144 centros que arrancan mañana el curso lectivo (incluyendo las escuelas oficiales de idiomas y los conservatorios). Y la causa del recorte está clara: se aumenta de 18 a 20 el número de horas lectivas por docente, lo que implica directamente que las jubilaciones no se cubran y que los interinos pasen a formar parte de las colas del Inem. El movimiento Marea Verde ha programado todo un calendario de movilizaciones para protestar precisamente por estos recortes. Ayer mismo habían previsto celebrar una manifestación con salida en Portada Alta, pero la Subdelegación del Gobierno no la autorizó. Según se explica en un comunicado de Marea Verde, el subdelegado, Jorge Hernández Mollar, «no ve motivos de urgencia en esta convocatoria».

Pese a todo, la Consejería de Educación afirma que se han aumentado las horas porque era un precepto obligatorio en el decreto del ministro del ramo, José Ignacio Wert, pero, sin embargo, no se ha aplicado el aumento de la ratio profesor/alumno. En cualquier caso, esta intención se incumple por la vía de los hechos consumados: es cierto que el crecimiento de la ratio es ligerísimo, pero prácticamente todos los institutos consultados están al límite legal: treinta alumnos para Secundaria y treinta y cinco para Bachillerato. Además, la Ley estatal de Educación prevé que se pueda incrementar hasta en un 10% la plantilla escolar por necesidades educativas (es decir, un alumno que llega a mitad de curso, o que en un pueblo exista un único instituto y sólo algunos de los habitantes se queden sin poder acudir al mismo). Todos los directores han hecho encaje de bolillos para reducir en lo posible la ratio, alcanzando mayor o menor éxito en su tarea.

En Andalucía, según la Junta, son 3.700 los profesores que van a ser despedidos, 561 interinos en Málaga. Ramoni Ruiz, de CSIF, explica que «el incremento del ratio se aplica de tapadillo, pero hay bachilleratos con 35 y 38 alumnos; no es que lo suban, es que llevan años aplicándolo». En un instituto de Rincón, aclara, había el pasado ejercicio académico dos bachilleratos con hasta 40 alumnos.

Y añade: «Los profesores, más que los directores, son los que denuncian aquí, en el sindicato, que tienen más alumnos de lo que marca la ley». Ruiz aclara que son seis interinos de media los que se han perdido en cada centro docente. Además, denuncia que hay muchos profesores de Secundaria a los que se le han asignado ya destinos o puestos específicos a los que se les comunicó la decisión por teléfono, y ahora Educación se ha echado atrás. «Son 900 interinos en la provincia los que van al paro, no 561 como se dice», apostilla.

Número de alumnos. En total, son 154.925 alumnos los que empiezan este lunes el instituto. Juan Sánchez, jefe de estudios del IES Romero Esteo, indica que no hay interinos (seis menos). «Los recortes se harán en actividades extraescolares, se harán menos, y las bajas no se cubrirán hasta los diez u once días, lo que obliga a tener profesores de guardia, que no es lo mismo que uno titular». Sánchez introduce un tema espinoso, porque algunos de sus colegas se verán obligados a dar asignaturas que no son su especialidad, con la consiguiente merma de calidad, explica Ramoni Ruiz. Y otros se verán obligados a cumplir con las veinte horas lectivas acudiendo a otros institutos.

En el Salvador Rueda, de Málaga capital, Cesáreo Flores, el director, se queja de que son los mismos profesores para dar 100 horas más de clase, y desde hace meses ni siquiera cuentan con dos auxiliares administrativos para hacer frente al papeleo del centro. Están enfermos desde abril y nadie los sustituye. Por cierto, la Junta no ha hecho pública la ratio.

Pepe Fernández, de CCOO, recalca que el 50% de los institutos supera la ratio, y recalca que el 10% de incremento que permite la ley propicia que quepa cualquier aumento de alumnos. Asegura que se pierden 850 puestos de trabajo ocupados por interinos, e insiste en el problema que supone que «profesores den clases de asignaturas que no son de su especialidad».