Los precios del tabaco suben más que las ganas de dejar de fumar y el contrabando de cartones se reactiva con la omnipresente crisis como telón de fondo. No hay más razones que expliquen el sensible aumento que la entrada de tabaco ilegal ha experimentado en España en los últimos años. En este mapa aparece Málaga, provincia con un cada vez más importante puerto comercial a nivel internacional y próxima a Algeciras y Gibraltar, los verdaderos focos de riesgo junto a Cataluña, Canarias y Galicia.

Aunque la Costa del Sol aparece en algunos informes como uno de los puntos más calientes del panorama nacional, los responsables de la Agencia Tributaria en Málaga no son tan dramáticos. Desde el mencionado organismo señalan que la cifras de entrada de tabaco de contrabando se sitúan en la media andaluza, aunque acusan que la tendencia es ascendente como consecuencia de la crisis. No obstante, Málaga no es un punto de entrada masivo como lo es Algeciras, añaden las mismas fuentes.

Los datos de la Agencia Tributaria muestran una ascensión paralela a la crisis en los últimos tres años y ocho meses, tanto en cajetillas de tabaco ilegal intervenidas como en el total de delitos imputados a los contrabandistas. Con el paréntesis de 2010, año en el que sólamente se impusieron sanciones administrativas, los datos dicen que en 2009 hubo tres imputados y 593.802 cajetillas de tabaco intervenidas, mientras que en 2011 los imputados se cuadriplicaron hasta llegar a la docena y las cajetillas se mantuvieron en 429.875.

Sin embargo, el dato más revelador es el de este año, ya que entre enero y agosto las personas imputadas por delitos de contrabando llegaron a la decena y las cajetillas alcanzaron las 647.218 unidades. Estadísticamente, aún quedan más de cuatro meses por delante.

Otro indicador interesante es que durante todo el 2011 se abrieron 96.934 expedientes por infracciones de contrabando, mientras que en el primer semestre del presente ya se alcanzaron los 56.285 expedientes. Según la Agencia Tributaria en Málaga, la entrada de tabaco en la provincia se realiza a través de pequeñas expediciones a Gibraltar y, sobre todo, oculto en contenedores que llegan al puerto de la capital procedentes de Asia.

Como la operación desarrollada en primavera en la que se localizaron 200.000 cajetillas de tabaco en un contenedor en el que se transportaban mantelerías procedentes de India. La mercancía podría haber alcanzado entonces un valor en el mercado por encima de los 670.000 euros.

Las autoridades dejaron que el contenedor llegara a su destino (Colmenar) y así desmantelar la red de contrabandistas. En ese caso, la marca del tabaco intervenido fue CK Canary Kingdom, aunque desde la Agencia Tributaria aseguran que lo normal es que entren las marcas que más se consumen, fundamentalmente rubio.

Eso sí, desde la mencionada administración detectan cada vez más la presencia irregular de las denominadas marcas low cost y lo que es peor, el tabaco falsificado, cuya amenaza es mayor porque además de la ausencia de ingresos públicos, se une el riesgo extra que supone la ausencia de controles sanitarios.

El comercio ilícito aumenta un 30%. El comercio ilícito de tabaco ha aumentado en España este año aproximadamente un 30% debido a los efectos de la crisis económica y al aumento de la fiscalidad sobre los cigarros. Son datos que la empresa tabaquera Altadis ha ofrecido recientemente en la jornada El comercio ilícito de tabaco, una lacra para la sociedad, en la que el sector analizó cómo el comercio legal del tabaco está cayendo debido al aumento del contrabando. Ignacio Millán, director de la Asesoría Jurídica de Altadis, explicó que los efectos negativos del contrabando de tabaco «se ceban» por un lado con el propio sector, por la caída de ventas, y por otro con los consumidores, «debido a que ese tabaco no pasa controles sanitarios».

El sector cree que la reforma legislativa de 2011 de la Ley del Contrabando «ha favorecido el comercio ilícito ya que antes se consideraba delito transportar tabaco por valor superior a 6.000 euros mientras que ahora, con la reforma, esa cantidad se ha elevado a 15.000 euros, lo que favorece el tráfico ilegal del género», según Millán.

Según los datos de Altadis, la presión fiscal sobre el tabaco ha hecho que su precio se haya duplicado en los últimos años debido «a la tentación de los gobernantes a incrementar los impuestos», dijo Jaime Gil, director de Asuntos Corporativos de Altadis. Gil recordó que son 1.500 personas las que trabajan en España actualmente en Altadis por lo que «el contrabando es una auténtica lacra para el empleo, ya que lo destruye».