La flota malagueña dedicada al marisqueo encendió ayer la luz de alerta, la de la marea roja que hace justo 19 días fue decretada. No se va a hacer pública hasta que se alcancen los 21 días. Pero ya es un clamor unánime la denuncia contra la Junta de Andalucía, que va a dar a conocer esta semana un segundo paro obligatorio sin haber abonado 160.000 euros que les adeuda a los armadores desde el anterior episodio de marea roja, el de la pasada Navidad.

El patrón mayor de la Cofradía de Pescadores de Caleta de Vélez, José Luis Guerrero, avanzó a este periódico que las embarcaciones de la provincia dedicadas históricamente a la pesca de la concha fina, la chirla o la coquina pueden tener sus días contados si no se salda la cantidad pendiente: «Estamos al borde de la bancarrota. Es una ruina que por primera vez se nos obligue a parar por marea roja sin que nos hayan pagado lo que está pactado por el anterior paro. Pero es que el año pasado ya nos pusieron contra las cuerdas, al retrasarnos el pago del parón del verano en el mes de enero».

Guerrero pone el acento en el hecho de que les consta a los armadores que las cantidades fueron ya libradas por Bruselas. «Nos indican que la Consejería no tiene ni un céntimo. Si es que el dinero lo han desviado para otras partidas, sólo podemos decirle a los responsables de esa decisión, que no deberían hacerlo. Está en juego el futuro de decenas de barcos, con sus armadores y puestos de trabajo directos e indirectos».

Los afectados están a la espera de un inminente encuentro con la Consejería de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente, donde se podría plantear que una entidad bancaria les anticipe estas deudas.