El verano que concluye se ha caracterizado en Andalucía por una consolidación de las temperaturas «extremadamente altas», con hasta dos grados por encima de la media, lo que el delegado territorial de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) atribuye a una consecuencia del cambio climático.

En rueda de prensa, el delegado de la Aemet en Andalucía, Luis Fernando López Cotín, explicó que la «rigurosidad» de un verano «extremadamente cálido» se está convirtiendo en la tónica un año tras otro en la comunidad, en una «anomalía» que, sin embargo, no resulta tan acusada en las temperaturas mínimas del invierno.

López Cotín indicó que la temperatura media en Málaga capital durante los tres meses de verano ha sido de 26,6 grados, lo que significa 2,1 grados por encima de la media de los últimos 30 años, y ha convertido a este verano en el más cálido de la capital malagueña desde 1942.

Málaga capital alcanzó una temperatura máxima de 41,4 grados el 12 de agosto, fecha situada dentro de una ola de calor que también captó 45,9 grados de máxima el 11 de agosto en Sevilla y 45,5 ese mismo día en Córdoba.

En toda Andalucía se han superado las temperaturas medias de los últimos años, destacando los 1,7 grados por encima de la media registrados en Huelva (con una media en los tres meses de verano de 26,5 grados), los 1,9 grados por encima de la media de Córdoba, los 1,4 grados de exceso en Sevilla y los 1,3 grados de Jaén y Granada.

Los 45,9 grados captados en Sevilla el 11 de agosto fueron el registro histórico más alto de un mes de agosto, aunque en Córdoba los 45,5 grados habían sido superados otro año con 46,6 grados de máxima. Este fenómeno se debe al cambio climático y, según el delegado de la Aemet, se consolidará en los próximos años con «un gran número de veranos que registrarán temperaturas por encima de la media de los últimos 30 años». Junto a ello, el verano andaluz se ha caracterizado por un «ambiente de sequía total» que empezará a mejorar a partir de mediados de esta semana, cuando entrará una borrasca por el oeste que traerá las «primeras y esperadas lluvias».

En cuanto a las precipitaciones, el otoño será en Andalucía «normal», sin lluvias torrenciales y con un régimen habitual para esta época del año frente al último invierno, que fue muy seco en contraste con los lluviosos años anteriores.

Con ello, según el delegado de la Aemet, se pondrá fin a un año hidrológico «desastroso» desde el punto de vista de las lluvias, con un 50 por ciento de precipitaciones respecto a la media que solo ha permitido mantener los niveles de los pantanos andaluces gracias a las lluvias abundantes del año 2010 y anteriores.

Un martes otoñal y un miércoles con alerta amarilla por lluvias. Hoy, habrá cielos poco nubosos, aumentando a nubosos, en las comarcas occidentales al final del día, con posibles precipitaciones débiles aisladas. El miércoles, Málaga estará en alerta amarilla por lluvia hasta las 12.00 horas en Ronda, la Costa del Sol y el Guadalhorce. Se esperan hasta 15 litros en una hora y 40 en doce horas.