La Asociación Nacional de Productores e Inversores de Energías Renovables (Anpier) celebró ayer una reunión en Málaga para informar sobre las «incertidumbres» que atraviesa un sector que ha asisistido a la progresiva retirada de primas primero con el Gobierno de Zapatero y ahora con el de Rajoy.
El responsable de Anpier, Luis Calatayud, explicó que en Andalucía, «miles de familias» han invertido sus ahorros en esta energía solar fotovoltaica, siendo la gran mayoría «pequeños productores que deben afrontar el pago de los préstamos solicitados para la instalación de sus plantas y que ahora no están recibiendo los retornos que en su día garantizó el Estado».
Las inversiones pueden ir desde 40.000-50.000 euros a máximos de 600.000 euros. La reciente reforma fiscal y las futuras modificaciones de la producción de energía renovable en el Estado añade nuevas incertidumbres a este colectivo. Las medidas del anteproyecto de Ley de medidas fiscales para el sector eléctrico, aprobadas en Consejo de Ministros el pasado día 14 de septiembre, incluyen un impuesto del 6% a la venta de energía eléctrica, que eleva la carga fiscal a la energía solar fotovoltaica hasta el 35% de la facturación, lo que lo colocaría fuera del umbral de rentabilidad».
