El desproporcionado interés de unos individuos por recuperar una vieja patera requisada por navegar sin luces y sin papeles levantó las sospechas de la policía, sobre todo cuando los reclamantes ofrecieron por la barca mucho más dinero de lo que realmente valía. Las sospechas llevaron a los agentes a seguirles la corriente hasta descubrir que la patera escondía media tonelada de hachís en un trabajado doble fondo.

Los hechos se remontan a la madrugada del pasado 15 de octubre, cuando una embarcación de Vigilancia Aduanera abordó en aguas de Benalmádena a una pequeña patera que navegaba sin las luces reglamentarias y cuyos tripulantes arrojaron apresuradamente sus móviles al mar. Cuando los agentes comprobaron que la barca tampoco tenía la documentación correspondiente decidieron intervenirla, remolcándola hasta puerto e inmovilizándola en un atraque hasta que finalmente fue trasladada al Depósito Judicial de Vehículos de Málaga. Allí quedó consignada a la espera de su retirada y la petición no tardó en llegar.

Varios individuos se presentaron en el depósito mostrando un gran interés por la barca hasta el punto de que ofrecían por ella mucho más dinero de su precio de mercado. De hecho, los más de 2.000 euros en sanciones y gastos de depósito que había acumulado la barca no suponían ningún problema para los demandantes. Finalmente, los interesados retiraron la embarcación el pasado día 6 de noviembre con una camión grúa ante un dispositivo de vigilancia que llevó a los agentes hasta una nave de la zona oeste de la capital malagueña.

En el interior del almacén, los investigadores hallaron la valiosa barca sobre la batea del vehículo y esparcidos por el piso varios paquetes de hachís. La escena la completaban tres hombres, dos de los cuales estaban manipulando algo en el interior de la embarcación. Cuando los agentes se acercaron a la barca comprobaron que la embarcación tenía varias tablas del suelo levantadas que ocultaban un doble fondo en el que había numerosos paquetes en forma de adoquines. Finalmente, los investigadores comprobaron que se trataba de hachís que arrojó un peso total de 497 kilos. Fruto de las indagaciones, que todavía continúan abiertas hasta el total esclarecimiento de los hechos, el día 8 de este mes fueron detenidas otras dos personas más por su presunta implicación en los hechos.