La polémica por los nombres de las estaciones de metro continúa y refleja que, en la Carretera de Cádiz, hay muchos vecinos descontentos con los nombres de unas estaciones que, resaltan, no cumplen su cometido final que es el de orientar a los viajeros.

Como ya hizo la asociación de vecinos de Huelin hace ahora dos años, la de la barriada Jardín de la Abadía ha pedido a Metro Málaga que el nombre de Huelin aparezca en el trazado de la línea 2 (La Malagueta-Palacio de los Deportes) y en concreto, que la actual estación Princesa pase a llamarse Princesa-Huelin, llevando dos nombres igual que ocurre con la estación La Luz-La Paz. Además, la asociación de vecinos propone que la estación anterior, La Isla, cambie su nombre por Jardín de la Abadía, al tratarse de un barrio más conocido y numeroso.

Estas dos propuestas las presentó el pasado mes de octubre en una reunión con Metro Málaga.

Uno de los asistentes a esa reunión fue el dirigente vecinal Pepe Acedo, socio fundador de la asociación de vecinos Parque del Mar, de Jardín de la Abadía.

«No hay esperanza de que cambien pero Princesa no lo conoce nadie, tiene mucho más sentido que se llame Princesa-Huelin», sostiene.

El cambio ya es algo que propuso la asociación de vecinos de Huelin, que en 2010 pidió directamente a Metro Málaga que la estación pasara a llamarse Huelin, a secas, por ser la zona por la que transcurre el metro.

«Ellos argumentan que no ponen apellidos en las estaciones, pero Huelin, aunque se puede interpretar como apellido, es un barrio muy clásico», defiende.

Con respecto a la parada anterior, La Isla, Pepe Acedo subraya que hace referencia a una barriada veterana pero muy pequeña, formada en su mayoría por casas mata, y que para el usuario tiene más lógica que la parada lleve el nombre de uno de los barrios más grandes de Huelin, Jardín de la Abadía.

En este caso, la negativa de Metro Málaga por el problema de los apellidos vendría de que el nombre del barrio recuerda el antiguo jardín de aclimatación que a comienzos del siglo XIX instaló en estos terrenos Francisco Javier Abadía. Al levantarse la urbanización, la constructora Genco transformó el jardín de Abadía en el jardín de la Abadía, cuando abadía no hay ninguna.

«La Isla es un barrio que no conoce nadie, muchos taxistas, cuando le dices que te lleven a La Isla, no saben dónde es y en el Jardín de la Abadía viven miles de vecinos», añade Pepe Acedo.

El criterio de Metro Málaga y por ende de la Junta de evitar nombres y apellidos en las estaciones tiene una excepción, la estación de Carranque, barrio cuyo nombre procede del apellido de uno de los primeros propietarios de esta antigua finca a finales del XVIII, Jerónimo García Carranque. A este respecto, el anterior director de Metro Málaga, Enrique Salvo, argumentaba que Carranque a su vez derivaba de un prefijo y un sufijo prerromanos que significan «río de piedra». En todo caso, la finca pasó a llamarse Carranque a partir del propietario con ese apellido.

Siguiendo la argumentación, habría que concluir que el industrial Eduardo Huelin, que dio nombre al barrio de Huelin, hubiera dado nombre a una estación del metro de haber tenido un apellido más acorde con la Naturaleza como Olmedo, Carrasco o Ribera. Los vecinos de Jardín de la Abadía siguen sin entender el criterio de la Junta, a su juicio, desorientador y poco justo. Por último, la asociación reclama a Metro la apertura al tráfico de dos carriles cerrados del puente de Juan Pablo II.

«Lo de las estaciones es un tema cerrado». Una portavoz de Metro Málaga dio por zanjado el asunto al subrayar que «lo de las estaciones es un tema zanjado y el Metro no va a volver a debatir sobre la denominación de ninguna estación».

En la misma línea, el anterior responsable de Metro Málaga, Enrique Salvo, ya respondió en diciembre de 2010 en este periódico a la asociación de vecinos de Huelin señalando que en las estaciones se buscó evitar nombres de personas para no tener problemas en el futuro por posibles cambios de nombre, cerrando por ello el paso a apellidos con 150 años de historia en la zona como Huelin.

Con respecto a la petición de apertura total del puente de Juan Pablo II, la portavoz de Metro Málaga informó de que la apertura de los dos carriles que quedan por abrir al tráfico -son cuatro en total- será inminente y en todo caso, se producirá «a lo largo de este mes».