El secretario general del PSOE malagueño, Miguel Ángel Heredia, denunció ayer que el PP de Málaga ha emprendido una campaña «sucia y vengativa» contra la Universidad de Málaga (UMA) y su rectora, Adelaida de la Calle, «como demuestran la cascada de declaraciones, primero con Francisco de la Torre y ahora con Celia Villalobos». «Pretenden amordazar a sus dirigentes y arrasar con el sistema público de universidades», aseguró.

Heredia hizo referencia a las críticas lanzadas por el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, en Nueva York (EEUU) y «a la deplorable actuación de Villalobos en el congreso de Nuevas Generaciones, esos hijos de la derecha política de este país que reciben clases magistrales de la diputada mejor formada de nuestro país», ironizó el socialista. «Villalobos está inhabilitada intelectualmente para hablar de la Universidad, su rectora y últimamente de casi todo», añadió.

El socialista también criticó que sus declaraciones son «impropias» de toda una vicepresidenta del Congreso, al tiempo que recordó que «uno de los principios de nuestra Constitución es la autonomía universitaria y Villalobos ha atacado esa autonomía», agregó.

En el fondo lo que radica es que «el PP no quiere universidad pública en Málaga ni una universidad libre, que se exprese con libertad, como lo hace la rectora y presidenta de la Conferencia de Rectores Universitarios de España», apuntó.

Para los socialistas, «esta campaña de ataque huele a vendeta del ministro de Educación, José Ignacio Wert, porque los rectores rechazan las medidas que dicta el ministro solo a favor de los ricos para que sus hijos estudien mientras que las familias medias deben pagar las matrículas más altas de la de democracia con las peores becas», concluyó.

Por su parte la asociación universitaria Entiende, que congrega a alumnos «que luchan por la igualdad de lesbianas, gays, transexuales y bisexuales, tachó de «desafortunadas» las palabras de Villalobos.

Nicolás Fernández, presidente de Entiende, señaló que la rectora contó con el apoyo mayoritario de la comunidad educativa universitaria, así como del apoyo de las diferentes universidades españolas para presidir la Conferencia de Rectores (Crue), por lo que «dudar de la legitimidad de la labor que realiza Adelaida de la Calle es una falta de respeto tanto a la institución como al resto de la comunidad universitaria». Así, animó al PP a adoptar una «postura constructiva en favor de la enseñanza pública».