El delegado del Gobierno andaluz en Málaga, José Luis Ruiz Espejo, presidió ayer el pleno del Consejo Provincial de Consumo en el que se abordaron asuntos como reforzar los consejos y cuidados ante las inspecciones fraudulentas de gas o el etiquetado de los juguetes de cara a la campaña navideña. Así, se dio cuenta de la actividad inspectora de la Junta de Andalucía, que este año ha hecho casi 4.400 inspecciones y ha destruido o retirado 4.000 productos peligrosos.

En el encuentro estuvieron presentes responsables y técnicos de la Dirección General de Consumo, la responsable de la Oficina de Vicepresidencia de la Junta en Málaga, Fátima Berlanga, representantes de la Confederación de Empresarios de Málaga, de la Federación Andaluza de Municipios y Provincias y de la organización de consumidores Facua.

En cuanto a la labor inspectora y a reclamaciones registradas por la Dirección General de Consumo de la Junta en lo que va de año, cabe destacar que el número total de reclamaciones registradas en 2012 asciende a 2.929, mientras que, en el mismo periodo del año pasado, la cifra se situó en 3.240, según la administración andaluza.