Un error en la web de Loterías y Apuestas del Estado (LAE) atribuyó la venta de una parte del Gordo de Navidad a varios establecimientos de diversas provincias españolas, entre ellas la localidad de Torrox -se había comunicado como agraciada con un quinto premio-lo que ha provocado primero el revuelo de los vecinos y medios de comunicación y, luego, la decepción.

Durante unos minutos varias administraciones de lotería de Teruel, Ávila, Burgos, Salamanca, Vitoria y Toledo, entre otros, aparecieron como agraciadas con alguno de los premios del sorteo y finalmente no lo fueron.

Así, las localidades abulenses de San Juan de la Nava y Villanueva del Campillo aparecieron por error entre las agraciadas con uno de los quintos premios, el 11.419, pero finalmente desaparecieron del listado. También la lotera Nieves, de la administración 21 del barrio salmantino de Puente Ladrillo, confirmaba a los medios de comunicación que había vendido un décimo del Gordo por máquina. Sin embargo, el delegado de Loterías en Salamanca, Federico Anaya, aclaró a los medios que el Gordo se ha vendido en Salamanca y también a través de máquina pero no en esa administración, sino en un estanco del céntrico paseo de Canalejas. De la misma forma, en Burgos capital dos establecimientos aparecían en el listado de la web de Loterías como repartidoras de parte del Gordo, dos décimos, aunque más tarde han desaparecido de ese listado.

En el caso de Teruel el error ha atribuido parte del Gordo de Navidad, el 76.058, y de un quinto premio, el 85.045, a dos administraciones de la ciudad, lo que ha provocado la alegría primero y luego la desilusión, tras los primeros minutos de confusión.

Elena Campos, propietaria de la administración de la carretera de Alcañiz donde la web de Loterías había situado parte de la venta del primer premio, conocía la noticia por los medios de comunicación que se encontraban en la puerta de su oficina. «Lo que sé es lo que me habéis dicho vosotros, pero en el listado no veo el número, a no ser que lo haya vendido a través de la terminal», explicaba a los periodistas y a los curiosos que se acercaban. Poco después llamaba a la delegación comercial de Loterías en Teruel donde le confirmaban que en el listado oficial de las administraciones que habían vendido ese primer premio no figuraba la suya. «Ahora tengo una mezcla de desilusión porque es la segunda vez que nos quedamos a las puertas», contaba Elena, recordando que en 2001 esta administración tuvo décimos del Gordo de Navidad que se devolvieron sin vender.