El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, el presidente de la Asociación de la Memoria Histórica, José Dorado, el delegado del gobierno de la Junta de Andalucía en Málaga, José Luis Ruiz Espejo, el secretario general de la Subdelegación del Gobierno, Luis Carlos Abreu, el director general de Memoria Democrática de la Junta de Andalucía, Luis Naranjo, el decano de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Málaga, Sebastián Fernández, así como representantes de asociaciones de vecinos del entorno, han asistido esta mañana al acto de primera piedra de las obras del Monumento en memoria de las víctimas de la Guerra Civil, que se va a levantar en los terrenos del antiguo cementerio de San Rafael.

Se enmarca dentro del convenio de colaboración firmado con la Asociación contra el Silencio y el Olvido y por la Recuperación de la Memoria Histórica de Málaga, que acuerdan la construcción de este monumento en recuerdo a las víctimas de la Guerra Civil española y en desarrollo de la Ley 52/07 de Memoria Histórica. Este proyecto ha sido redactado por el departamento de Arquitectura de la Gerencia Municipal de Urbanismo. Las obras, que van a ser ejecutadas por Corsan Corvian S.A, han sido adjudicadas por un importe de 181.500 euros (IVA incluido). La financiación se cubre mediante aportaciones del Ayuntamiento y la Asociación para la Memoria Histórica.

El monumento tendrá la forma de una pirámide de 8 metros de alto y una superficie de 140 metros cuadrados. Concretamente contempla las obras para la construcción de una pirámide regular de cuatro lados, cuyo interior se distribuirá en un espacio único ocupable que se desarrollará en una planta a nivel de sótano desde la superficie de acceso. En la parte exterior, que estará recubierta de mármol blanco, se grabarán los nombres de todas las víctimas que han sido documentadas, quedando abierta a nuevas incorporaciones que puedan surgir de investigaciones posteriores.

La pirámide está formada por una estructura sustentante de acero, sobre la que se colocará una chapa acanalada que le confiere su impermeabilización, y que sirve además de soporte para su recubrimiento de piezas de mármol blanco de Macael. La estructura se apoya sobre los muros de contención de hormigón armado, que conforman el recinto a nivel de sótano. La cimentación de los muros, será a base de zapatas continuas de hormigón armado. El pavimento estará formado por una solera de hormigón ligeramente armado, a la que se dará un tratamiento superficial de fratasado mecánico. No presenta barreras arquitectónicas, siendo perfectamente accesible desde el exterior.

Asimismo, la Gerencia de Urbanismo ha iniciado la redacción de un proyecto por el que se convertirá el antiguo cementerio de San Rafael en un parque. El Ayuntamiento pedirá a la Juntala financiación de las obras con fondos europeos.

Con la construcción de esta pirámide culminará el trabajo iniciado en el año 2003, cuando el Pleno de la Corporación Local aprobó por unanimidad dotar de medios económicos y materiales los trabajos de excavación de las fosas de cuya existencia se tenía constancia en el Cementerio de San Rafael. Las investigaciones realizadas desde entonces han contado con el asesoramiento de expertos de la Universidad de Málaga y el sucesivo apoyo financiero que su desarrollo ha requerido.

En noviembre de 2006, se firmó un convenio para la exhumación de los restos en el cementerio de San Rafael relacionados con la Guerra Civil por un importe de 240.000 euros, de los que el Ayuntamiento de Málaga aportó 80.000 euros, la Junta de Andalucía otros 80.000 y la asociación para la memoria histórica la cantidad restante gracias a una subvención recibida del Ministerio de la Presidencia y una donación de Unicaja por un importe de 20.000 euros. En 2007 se procedió a firmar un segundo convenio, con la misma cuantía global de 240.000 euros, en el que otros 80.000 euros fueron con cargo al presupuesto del Ayuntamiento de Málaga. A esta cantidad se sumaron ese mismo año 80.000 euros más, al firmarse una adenda al convenio, que preveía una inversión de 260.000 euros más. En total, desde que comenzaran las primeras actuaciones en el Cementerio de San Rafael hasta la fecha, el Ayuntamiento de Málaga ha aportado 240.000 euros a los que ahora se añadirán los 80.000 euros más para la construcción del monumento de recuerdo.