En los últimos años la bronquiolitis se ha erigido como la reina de las urgencias pediátricas. Seguida de lejos por los problemas gastrointestinales, ha desbancado a otros problemas respiratorios, haciendo que cinco de cada diez niños padezcan este virus alguna vez en la vida.

Como tal, solo puede tenerse una vez, pero ayuda a predisponer los pulmones del niño a futuros problemas respiratorios, según explicó ayer el jefe de Pediatría del Hospital Quirón Málaga, Manuel Baca, en el marco del sexto Simposio de Pediatría, que ha reunido a más de 400 profesionales del sector con el objeto de analizar los avances del último año para conseguir que los niños enfermos accedan a novedosas modalidades de tratamiento y diagnóstico.

Y es que uno de los principales temas de debate del encuentro eran las urgencias pediátricas, «lo que más preocupa a los padres». Asegura que junto a la bronquiolitis, el asma, la fiebre y los problemas intestinales se llevan la palma de las urgencias e ingresos de los pequeños. De este modo, el doctor reconoce que el virus de la bronquiolitis se ha convertido en uno de los grandes conocidos de los hospitales. Tras hacerse paso a finales del siglo XX, hoy día es una enfermedad muy común, pero que preocupa a padres y médicos. «Es un estigma propio de todos los países occidentales, incluso en los de más avance tecnológico. Es una patología al alza», alerta el experto.

La bronquiolitis es, en palabras del doctor, una bronquitis de muy mala evolución que deja el aparato respiratorio marcado hasta el punto de crear problemas respiratorios futuros. «El problema es que logra que se desencadenen fenómenos futuros, es frecuente que en esta época casi todos los meses tengan alguna bronquitis y todo a causa de haber tenido una bronquiolitis». De hecho, alerta de que hay familias que lo han pasado tan mal que programan sus embarazos para que los recién nacidos no se expongan al virus en los meses fríos en los que aún es muy pequeño.

Baca avisa de que muchos de estos niños requieren de ingresos hospitalarios por la gravedad de su problema para respirar, por lo que asegura que el trabajo del pediatra en urgencias es «fundamental» para tratar la afección.

En cuanto a sus posibles causas, el jefe de pediatría de Quirón Málaga asegura que la mayoría de las opiniones es que se corresponde con la polución y la higiene, ya sea colectiva o individual. Sin embargo, alerta de que los problemas derivados del tabaco se han eliminado, lo que ha hecho que hayan disminuido muchos de estos casos, ya que los niños se convertían en fumadores pasivos. «Posiblemente hay otros factores de momento desconocidos».

Por este motivo, afirma que el reto actual es evitar que los niños contraigan este virus y cómo tratarlo antes de que sea agresivo y requiera de la hospitalización. «De cada diez niños, la mitad se puede contaminar por bronquiolitis», explica el médico, que cree que los recién nacidos son propensos a desarrollar el virus porque le es más fácil entrar en sus pulmones que en el de los adultos.

Asegura que de momento no se puede evitar más que con una vacuna hospitalaria que de momento se suministra sólo a recién nacidos prematuros. «Es una medicación cara y a nivel mundial en ningún país está en el calendario, puede que en unos años se ponga y se generalice. Habría que verlo».